El PP cierra filas en torno al conselleiro de Sanidade tras la manifestación multitudinaria de Vigo

Ángel Paniagua / Juan Capeáns VIGO, SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Manifestación por la atención primaria y la sanidad pública celebrada este jueves en Vigo
Manifestación por la atención primaria y la sanidad pública celebrada este jueves en Vigo XOAN CARLOS GIL

Desde la formación conservadora aseguran que «o que podemos facer no PP é defender a Vázquez Almuíña e criticar os que atacan a un Goberno coa sanidade»

29 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

En la manifestación que recorrió Vigo el jueves por la tarde para reclamar soluciones a los problemas de la atención primaria se pidió insistentemente la dimisión del conselleiro de Sanidade, pero en el PPdeG no quieren ni oír hablar de que Jesús Vázquez Almuíña deje su cargo. El secretario general de la formación conservadora, Miguel Tellado, se encargó de cerrar filas en torno a Almuíña, diciendo de él que es «un gran conselleiro de Sanidade» y que está «preparado e formado, que sabe resolver os problemas». Tellado incluso lanzó un mensaje a los suyos para dejar bien claro el argumentario: «O que podemos facer no PP é defender a Vázquez Almuíña e criticar os que atacan a un Goberno coa sanidade».

Tellado lamentó que la oposición hubiese aprovechado para sacar «tallada política e frustración» de asuntos que, entiende, deben estar fuera de agenda: «A sanidade é sensible e non debe utilizarse para o desprestixio». Se refería a la presencia de los tres líderes de la oposición en la manifestación de Vigo, que fue convocada por los profesionales de atención primaria después de la dimisión de 25 jefes de centros de salud de la ciudad y su área y de la renuncia de una más a su nombramiento. En la protesta hubo muchos miles de personas; la cifra oficial del Ayuntamiento de Vigo fue de 37.000.

Luís Villares (En Marea), Gonzalo Caballero (PSdeG) y Ana Pontón (BNG) estuvieron en la manifestación de Vigo y en ella cargaron contra la política sanitaria de Feijoo. Los jefes de servicio dimisionarios impusieron a los sindicatos la condición de que ellos encabezarían la marcha con batas blancas y que ni los logotipos sindicales ni los representantes políticos irían en la cabecera, como así sucedió. Con todo, un portavoz del colectivo de dimisionarios expresó su malestar este viernes por que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, insinuase horas antes de la marcha que se basaba en mentiras.

El PSOE insistió con la dimisión. «Non o vexo capaz de representar e de impulsar a nova política que a sanidade necesita», dijo el portavoz parlamentario, Xoaquín Fernández Leiceaga. El alcalde, Abel Caballero, llamó a movilizarse de nuevo por la sanidad en Vigo el día 24 de enero.  

«Retos claros»

Pero si el PP cierra filas con Almuíña, el Sergas cierra filas con su propia política. El gerente del Servizo Galego de Saúde, Antonio Fernández-Campa, reconoció este viernes que el organismo no variará su hoja de ruta por la protesta de Vigo. «Hemos constituido los grupos de trabajo para buscar soluciones a corto, medio y largo plazo», insiste Campa. Se refiere a los grupos integrados por 60 personas -ninguno de los 25 dimisionarios- que Almuíña anunció después de la dimisión de los jefes de servicio.

Pero no habrá más medidas que esa. El mensaje que ha recibido el Sergas de la manifestación de Vigo es que «hay unos retos claros en atención primaria: la falta de profesionales y el incremento de la demanda provocado por la cronicidad», dice Campa. Es un mensaje en el que el Sergas llevaba insistiendo desde antes incluso de la manifestación, pero que a los profesionales les pareció insuficiente.

«La manifestación se basaba en que la situación de la atención primaria es peor que hace diez años, pero creo que no, que está mejor», dice el gerente del Sergas. Se refiere a la implantación de la historia y la receta electrónicas, al control del Sintrom, al acceso a pruebas y a otras medidas.

El Sergas reclama que el Ministerio de Sanidad tome medidas para mejorar la contratación de médicos jóvenes mientras plantea una propuesta para hacer contratos largos, de un año. Campa dice que en mayo terminarán la formación mir 110 doctores de familia y pediatras, que serían candidatos a ese contrato.