Fomento y Xunta tendrán que cambiar 600 señales de 100 a 90 en Galicia

José Manuel Pan
José Manuel pan REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Tramo de la carretera N-640 en Lugo que deberá cambiar las señales de 100 a 90 para adaptarse a los nuevos límites máximos
Tramo de la carretera N-640 en Lugo que deberá cambiar las señales de 100 a 90 para adaptarse a los nuevos límites máximos OSCAR CELA

El Consejo de Ministros aprobó este viernes los nuevos límites, que entrarán en vigor en un mes

09 ene 2019 . Actualizado a las 19:00 h.

La modificación de la limitación de la velocidad máxima de 100 a 90 kilómetros por hora en las carreteras convencionales obligará a cambiar unas 600 señales (450 la Xunta y 148 Fomento) en la red viaria gallega, donde se verán afectados unos dos mil kilómetros. El Consejo de Ministros dio luz verde este viernes a la reducción de la velocidad máxima, que entrará en vigor en febrero, un mes después de su publicación en el Boletín Oficial del Estado, lo que probablemente se hará en los próximos días. Las carreteras afectadas son las de doble sentido sin separación física en la mediana, que son las que soportan la mayoría de los accidentes mortales, alrededor de un 70 % en España y cerca de un 90 % en Galicia. En autopistas y autovías no se tocará la limitación máxima, que seguirá siendo de 120 km/h para turismos y motocicletas.  

En Galicia hay más de 1.500 kilómetros de carreteras del Estado de tipo convencional, pero no todas tienen la limitación máxima de 100. En las que sí la tienen, que son las que disponen de arcén de un metro y medio de ancho, el Ministerio de Fomento tendrá que cambiar las señales para poner el indicativo de 90. Las carreteras convencionales son las más frecuentes en Galicia, donde hay más de 17.000 kilómetros de esas vías gestionadas por el Estado, la Xunta, las diputaciones y los ayuntamientos.

La Xunta tiene bajo su competencia unos 5.000 kilómetros de red convencional de tres tipos: primaria básica, primaria complementaria y secundaria. La Consellería de Infraestruturas que dirige Ethel Vázquez cuenta con 54 carreteras con limitación de 100 kilómetros por hora. Para cambiarlas a los 90 que exige la reforma del Reglamento General de Circulación tendrá que modificar los dígitos en 450 señales. La mayoría se transformarán mediante pegatinas de 90 que se colocarán sobre las actuales de 100, aunque en algunos casos se cambiará el disco completo. En total, la consellería destinará alrededor de 50.000 euros para cumplir con la nueva normativa.

En el caso de las carreteras del Estado afectadas por la nueva limitación se pondrán señales completamente nuevas en todos los casos, según fuentes de la Delegación del Gobierno en Galicia.  

Un mes para cambiar las señales

Las Administraciones públicas con carreteras afectadas por la nueva limitación de velocidad dispondrán de un plazo de un mes desde la publicación en el BOE para adaptar las señales. El Gobierno concede ese tiempo para que los titulares de las carreteras puedan proceder al cambio. De todas formas, la nueva limitación se irá aplicando a medida que se vaya cambiando la señalización, sin tener que esperar a que se cumpla el mes de plazo.  

Reducir la siniestralidad

Esta modificación en la limitación genérica de la velocidad en carretera es la primera que se hace en España en treinta años, y responde al intento de la DGT de reducir la siniestralidad. Además, la medida homologa a España con la mayoría de los países del entorno y atiende al criterio de la Unión Europea para aumentar la seguridad vial. Lo advierte así la comisaría europea de Transportes, Victoria Bulc: «Cada muerto o herido grave es una víctima que debería haberse evitado. A lo largo de las últimas décadas hemos obtenido resultados impresionantes en la reducción de los accidentes con víctimas mortales, pero el estancamiento actual es alarmante».

La conselleira apoya la medida pero hubiera deseado «máis información» por parte de la DGT

La Consellería de Infraestruturas tiene todo previsto para cumplir con la nueva limitación de velocidad antes de que se cumpla el plazo de un mes establecido en el real decreto aprobado ayer por el Consejo de Ministros. «Estamos preparados para que en trinta días estean implantados os novos sinais nas estradas da Xunta», aseguró la conselleira Ethel Vázquez, quien recordó que «a seguridade viaria é unha preocupación prioritaria para o Goberno galego, e por iso destinamos moitos recursos a ela de forma permanente».

De todas formas, la conselleira criticó la forma en la que la DGT hizo este cambio, en especial por la falta de información: «Vemos con bos ollos todas as medidas que teñan un efecto positivo na redución da sinistralidade, como a de pasar de 100 a 90 nas estradas convencionais, pero o desexable sería que se nos trasladase máis información sobre o alcance desta medida, porque a Xunta ten competencia en moitas das estradas afectadas».  

A 100 si hay separación física

Por ejemplo, la conselleira plantea las dudas que tiene su departamento sobre la forma de actuar en algunas de las carreteras autonómicas, como es el caso de los corredores en aquellos tramos que cuentan con separación física por medio de pivotes entre los dos sentidos de circulación. Aunque desde la DGT no hayan informado a la Xunta, lo cierto es que el real decreto contempla ese tipo de casos, los de carreteras de tipo convencional pero con separación física entre carriles. Y en esas situaciones se permite que la Administración titular de la vía, en este caso la Xunta, tenga la posibilidad, de forma excepcional, de mantener la limitación de 100 kilómetros por hora en esos tramos.