Hospitales privados y médicos piden al Sergas solución a las incompatibilidades

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

ALBERTO LÓPEZ

Esgrimen la sentencia que ampara ejercer en la pública y en la privada si no es concertada

15 dic 2018 . Actualizado a las 16:39 h.

Un criterio homogéneo en toda España, e idéntico para todos los médicos, independientemente de si desarrollan su trabajo en un hospital que tiene concierto con el Sergas, en una clínica privada o en su propia consulta. Es lo que piden los hospitales privados y los facultativos, una petición que ahora se refuerza con la sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia que da la razón a una ginecóloga gallega a la que habían denegado la compatibilidad.

La aplicación de la ley del año 1984 que regula el ejercicio de la actividad pública y privada es diferente en cada comunidad autónoma pese a ser una norma estatal. Las más restrictivas son Murcia y Extremadura. Y Galicia, donde se entiende que un médico del Sergas no puede trabajar en un hospital concertado. Pero esta sentencia diferencia entre actividad y centro, es decir, pueden compaginarse ambos trabajos siempre que no se atienda a pacientes derivados de la pública, aunque sea en un hospital con concierto.

La Consellería de Sanidade no ha tomado, de momento, ninguna decisión. La única comunicación es que la asesoría jurídica está estudiando el fallo del tribunal. Queda por saber si recurrirá, si modificará sus criterios o si se mantendrá en la misma línea. El Sergas se ha aferrado a una sentencia, también del alto tribunal gallego, cuya jurisprudencia era la contraria, pero ahora se abre una nueva vía.

Hacienda también lo ampara

Lo curioso de cómo debe regularse la actividad sanitaria de los profesionales de la pública en el sector privado es que hay distintas interpretaciones, no solo entre comunidades, sino también entre la Administración general y la autonómica. En el año 2016, la Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE) hizo una consulta formal al Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas. En concreto, a la Oficina de Conflictos de Intereses. Y lo que dice su directora es que se considera actividad pública aquella que se desarrolla bajo el objeto del concierto, es decir, no toda la asistencia que haga el hospital concertado.

Esto es precisamente lo que quiere la Asociación de Hospitales de Galicia (Ahosgal), que engloba a los doce hospitales concertados de la comunidad. Aseguran que la sentencia «ofrece garantías y seguridad jurídica a los profesionales y a los centros hospitalarios». Reclaman además que la Xunta aplique «ya» el criterio del Tribunal para conceder la compatibilidad a los médicos. ASPE también ha valorado una sentencia que, según la asociación, ratifica sus reivindicaciones y coincide con el criterio del Ministerio de Hacienda. Lo que quiere la patronal de la sanidad privada es la «unificación de criterios en todo el territorio nacional».

Y lo que quieren los facultativos es también eso, cumplir la ley: es decir, que los médicos de la sanidad pública no realicen actividad concertada con el Sergas. «Así de sencillo», explican.

Solo en el mes de noviembre se concedió permiso a 17 facultativos

Función Pública no niega la compatibilidad para ejercer en la pública y en la privada. El portal de transparencia de la Xunta hace públicos estos datos y cada mes hay decenas y decenas de autorizaciones a trabajadores públicos para que ejerzan de forma puntual o permanente otra actividad compatible. El bloqueo viene con los centros concertados. De hecho, haciendo un repaso por las últimas compatibilidades, solo en el pasado mes de noviembre se dio este permiso a 17 médicos gallegos, la mayoría de especialidades de oftalmología y ginecología. Ninguna para trabajar en un hospital concertado.

Eso no quiere decir que no haya numerosos facultativos en este tipo de centros, ya que la cifra de los que compaginan sanidad pública y concertada se sitúa en torno a los 700, de los más de 4.000 facultativos de atención especializada que hay, es decir, menos del 20 %. Es desde hace unos años cuando Función Pública ha comenzado a aplicar de forma más restrictiva la ley en los hospitales con concierto.

Carrera profesional

Por otro lado, el TSXG ha admitido a trámite la demanda de Comisiones Obreras contra el Sergas sobre la carrera profesional, al entender que debe beneficiar a todo el personal, y no solo a los fijos y eventuales de larga duración.

«Creo que es un avance para todos mis compañeros»

La sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia que le da la razón frente al Sergas la ha cogido por sorpresa. María Méndez ya no tiene problemas para conseguir la compatibilidad que concede Función Pública, ya que trabaja en una clínica sin ningún tipo de concierto, pero está muy satisfecha por un fallo que da seguridad a muchos de sus compañeros. «Creo que es un avance para todos mis compañeros, aunque realmente a mí ahora no me afecte», apunta.

Sabe de qué habla porque esta especialista en ginecología del área sanitaria de A Coruña ve lo que les está ocurriendo a otros profesionales médicos. «En A Coruña, todos los hospitales privados que hay tienen un concierto con el Sergas, por lo que a todos los compañeros se les estaba denegando la compatibilidad de forma sistemática, y a algunos ya los han sancionado», explica. Conoce algún caso, por ejemplo, en el que el médico ha sido suspendido de empleo y sueldo durante un mes, por lo que prevé que la sentencia va a tener «una trascendencia enorme para ellos». «Es un avance para todos mis compañeros», dice.

Solicitó la compatibilidad a la Consellería de Facenda en mayo del 2017 y la respuesta fue negativa: «La explicación era que el centro en el que ejercía mi actividad privada tenía un concierto con el Sergas». Pero la única actividad derivada por el sistema público es la interrupción voluntaria del embarazo (IVE): «Y no realizaba IVE, lo único que hacía era pasar consulta de ginecología y de obstetricia». Reclamó por vía administrativa y la respuesta fue la misma. Su siguiente paso fue acudir al Colegio Oficial de Médicos de A Coruña, en donde la asesoría jurídica le explicó que había muchos otros facultativos en la misma situación. Tras un primer revés en el juzgado, la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior le ha dado la razón. A ella y probablemente a muchos más, porque María no duda de que habrá más reclamaciones a partir de esta resolución.

Tampoco duda de que el Sergas se pondrá las pilas. «Entiendo que a partir de ahora flexibilizarán la aplicación de la ley y empezarán a dar la compatibilidad, lógicamente si no estás haciendo actividad concertada», aclara.

El problema que se planteaba es para Méndez que solo había rechazo en el caso de pedir permiso para trabajar en un centro con concierto, «ese era el único problema», es decir, no en otro tipo de clínica. Una situación que genera un agravio comparativo entre compañeros, «ya que estar en un entorno sanitario tiene más garantías y con esta política parece que quieren que se trabaje fuera de ese entorno y que montes tu propia consulta».

Una ley de más de 30 años

La ley del año 1984, que regula estas incompatibilidades, está obsoleta, a juicio de los médicos, y de hecho la propia Consellería de Sanidade admite que necesita reformas, pero al tratarse de una norma estatal es el Gobierno central el que debe actualizarla. La Xunta propuso su modificación en el grupo de trabajo que estudia el déficit de profesionales sanitarios a nivel estatal.