La joven de Lugo será sometida a análisis específicos para concluir si la drogaron con burundanga

TANIA TABOADA LUGO / LA VOZ

GALICIA

MARCOS MÍGUEZ

Los investigadores también enviaron a analizar las sábanas de la pensión donde apareció la mujer

05 dic 2018 . Actualizado a las 09:44 h.

La lucense de 25 años a la que se sospecha que le dieron burundanga y que despertó en una pensión en compañía de un hombre al que no conocía y sin recuerdos de la noche anterior será sometida a análisis específicos por parte de los servicios médicos para tratar de confirmar si fue drogada por los dos detenidos con algún tipo de sustancia. Es el nuevo paso en la investigación iniciada desde el pasado sábado, cuando la chica acudió con su pareja a denunciar en comisaría lo sucedido. En los análisis rutinarios a los que fue sometida en el HULA no aparece rastro de ninguna droga que explique lo sucedido, pero eso no significa que la chica no fuese drogada con algún tipo de sustancia para anular su voluntad.

Los investigadores de la Policía Nacional que se encargan del caso solicitaron análisis específicos para detectar la presencia de alguna sustancia estupefaciente que puede provocar ese tipo de También enviaron a analizar las sábanas de la pensión donde apareció la jovenefecto en las personas, porque suelen ser difíciles de detectar con las pruebas convencionales. . Ahora toca esperar a los resultados procedentes de Madrid.

El segundo caso

Hay un segundo caso en el que otra joven perdió la noción del tiempo pero que la Policía dice que no está relacionado con el anterior. Se trata de una mujer de 27 años, natural de Vigo pero residente en Lugo, que recobró la consciencia sobre las 13.30 horas del domingo circulando en un Renault junto a dos chicos. Uno de ellos frecuenta la zona de Marina Española y ella lo conoce de vista.

La joven indicó que perdió la noción del tiempo pasadas las tres de la madrugada, cuando se encontraba en un pub con dos de los chicos con los que fue a hacer un extra de camarera en Castroverde y tras ir al aseo. La joven indicó que, cuando recobró la consciencia, subió con los chicos con los que viajaba en el coche a una vivienda en la que había dos personas. Relató que en esa casa apareció minutos después la pareja de uno de ellos e iniciaron una celebración familiar, tocando palmas y escuchando música. Fue a las 18.00 horas cuando la chica pidió a uno de los jóvenes que la llevara a casa. Llegó sin bragas y sin mochila, donde llevaba su documentación, su teléfono y el uniforme de camarera. Le contó a su novio lo ocurrido y este guardó la ropa de la chica, impidió que se duchara y la invitó a descansar. El novio ya había intentado ponerse en contacto con ella, pero no lo consiguió y fue a las 17.30 horas cuando el móvil dejó de dar señal. Cuando la chica estaba durmiendo, su pareja investigó los locales por los que había pasado su novia esa noche. Cuando la chica despertó la llevó al HULA. Manifestó ser consumidora ocasional de cocaína, pero que la noche de los hechos no había consumido. En la analítica realizada arrojó una tasa de 0,10 de alcohol en sangre.

El abogado de uno de los hombres en prisión sostiene que no hay pruebas suficientes

El abogado de uno de los dos hombres enviados a la cárcel por supuestos abusos a la joven de Lugo aseguró que los investigados mantienen una versión distinta a la de la chica. También indicó que por el momento no hay pruebas que determinen la culpabilidad. Sobre lo sucedido, el letrado de uno de los arrestados, Jacobo Vázquez, precisó que la declaración de los acusados es totalmente contradictoria con la de la chica. Por ello considera que la medida de prisión -los dos detenidos, de 38 y 43 años, fueron trasladados al centro penitenciario de Bonxe el lunes por la noche- es muy restrictiva, especialmente si se tiene en cuenta «la falta de pruebas» que los relacionen con el caso.

El letrado avanzó que recurrirá el auto de prisión y entiende que los dos deben quedar en libertad hasta que haya juicio y se practiquen las diligencias necesarias para esclarecer el caso.