El juez deja en libertad sin cargos a un joven que alardeó de haber quemado a otro en Carballo
GALICIA
Álex Muíño se mostró muy sorprendido por la detención del joven, aunque sabía de su existencia por terceras personas
22 nov 2018 . Actualizado a las 14:40 h.Agentes del área de investigación de la Guardia Civil de Carballo detuvieron este miércoles a un joven de 20 años, residente en A Silva-Cerceda, como presunto autor de un delito de lesiones graves. En concreto, por las quemaduras sufridas por el joven carballés Álex Muíño en la madrugada del 27 de octubre. Sin embargo, tras prestar declaración, el juez lo dejó en libertad sin cargos.
Los guardias llamaron al joven cercedense a primera hora de la mañana para que se personara en el cuartel, pero sin explicarle el motivo del requerimiento. En cuanto llegó le informaron de que estaba detenido. Las pruebas se basaban en «testigos indirectos» de los hechos. Al parecer el joven había alardeado de la agresión y había hecho diversos comentarios sobre el suceso ocurrido en la rúa Ourense de Carballo poco antes de las seis de la madrugada.
La vinculación de este joven con las graves lesiones que sufrió Álex Muíño era un secreto a voces en la zona de A Silva desde hace ya varias semanas. De hecho, llegó a oídos de Álex Muíño que el muchacho preguntaba por él y había hecho comentarios, a pesar de que no lo conocía en absoluto.
La víctima comentó esta situación a los agentes cuando presentó la denuncia. Para ello tuvo que esperar a que le dieran el alta. La médico que lo atendió en urgencias del Chuac no consideró que las lesiones hubieran sido producidas por un hecho violento y no lo tramitó como tal, por lo que la Guardia Civil recomendó a los padres de Álex Muíño, en dos ocasiones, que fuera él mismo el que denunciara los hechos. Así, la investigación no se puso en marcha de forma oficial hasta el 16 de noviembre y la detención se ha producido apenas cinco días después, basada en lo que comentó el joven cercedense a su entorno.
El investigado se negó a prestar declaración en la Guardia Civil y pasó a disposición judicial en torno al mediodía ante el titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Carballo. Allí testificó durante una hora. Relató que aquella noche había salido de fiesta con unos amigos y que no se había separado de ellos en ningún momento.
También explicó que regresó a casa pasadas las cinco de la madrugada en taxi, aunque desde hace semanas un noitebús une A Silva con Carballo. Tras escuchar su versión, el juez decretó su libertad sin cargos y solo fijó como medida cautelar que notificase al juzgado cualquier cambio de domicilio que realice.
La investigación de este caso ha tenido un recorrido muy corto y el principal problema es que no hay testigos directos de los hechos.
Lo que sí está claro es que el detenido salió esa noche y que a la hora de los hechos se encontraba por la zona. También es muy improbable que se encontrara solo de madrugada en Carballo. De hecho, explicó al juez que iba en grupo. La única forma de probar la autoría, si es que el hecho no fue fortuito o provocado por otra persona, sería investigar el entorno del joven cercedense, que podría exponerse a un cargo de denegación de auxilio, aunque tampoco eso es tan sencillo, puesto que Álex Muíño una vez se arrancó la camisa en llamas se fue a casa a dormir y tardó casi cinco horas en acudir al médico porque tenía molestias.
«Non o coñezo e sorpréndeme que sexa tan novo»
Álex Muíño se mostró muy sorprendido por la detención del joven, aunque sabía de su existencia por terceras personas. Lo que más le sorprendió fue su edad. Los seis años de diferencia entre ambos hace que no frecuenten los mismos ambientes. De hecho, la víctima asegura que no lo conoce de nada. El joven detenido y a continuación liberado estudió en el instituto de Ordes y jugó al fútbol. Nada de eso puede relacionarlo con Álex Muíño, que trabajaba como camarero y cuando ocurrió el suceso estaba de vacaciones, con idea de cambiar de trabajo.