Juicios aplazados hasta el próximo verano

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Javier Etxezarreta | efe

En Ourense se suspendieron las declaraciones por el caso de acoso inmobiliario de la Xunta a una vecina

20 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La huelga de jueces y fiscales alteró la actividad en los juzgados gallegos, donde el seguimiento al paro fue desigual, aunque fue necesario suspender juicios que no tendrán fecha al menos hasta el próximo verano.

Una treintena de jueces y magistrados (de 48) hicieron huelga ayer en Vigo, así como tres fiscales. Alrededor de una quincena se concentraron ante la sección viguesa de la Audiencia Provincial, donde el juez decano, Germán Serrano, y un fiscal leyeron un comunicado. Se suspendieron 42 juicios programados (siete ya habían sido aplazados previamente) y 11 declaraciones. Hubo quejas de unos litigantes de A Coruña que se desplazaron a un juicio al juzgado de lo social de refuerzo de Vigo, y por la huelga les aplazaron la vista hasta el 24 de junio del 2019. Por su parte, el juez decano derivó sus juicios suspendidos a diciembre y enero y celebró uno porque era urgente. Otra jueza en huelga atendió una declaración de servicios mínimos porque había una niña afectada. La fiscala jefa de Vigo, Susana García-Baquero, tuvo que acudir, en servicios mínimos, al juicio de los miguelianos en Pontevedra por ser una causa con preso.

En A Coruña, el juez decano, Pérez Merino, y el fiscal jefe, Javier Rey, encabezaron la concentración de jueces y fiscales de los órganos judiciales de A Coruña. Afiliados de las cuatro asociaciones de jueces y de las tres de fiscales pararon para reivindicar una mejora de sus condiciones laborales y salariales, así como para reclamar más medios humanos y técnicos en la Administración judicial. Se quejan de una Justicia anticuada, obsoleta, insuficiente y lenta, con una crisis de imagen sin precedentes.

Tanto los jueces como los fiscales del partido judicial coruñés, donde se sumaron al paro 83 juristas, hicieron suyas las palabras recogidas en el documento presentado por las distintas asociaciones al Ministerio de Justicia.

No llegaron a suspenderse juicios porque ya no estaban señalados debido a la huelga. Sí conformidades, como la que se firmó en la sección primera de la Audiencia. En el resto de los órganos, la gran mayoría de los jueces secundaron la huelga, si bien lo hicieron en su lugar de trabajo. «La carga de trabajo supera todas las ratios. No tenemos horario. De lunes a lunes», dijo ayer Pérez Merino.

En Ourense, la huelga fue secundada por diez jueces, según las cifras oficiales del Tribunal Superior de Xustiza. Nueve de los dieciséis fiscales de plantilla también se sumaron al paro. Fue la decisión de una de las representantes del ministerio público, en paro, la que obligó a suspender el único juicio que se vio afectado en toda la provincia. En los demás órganos jurisdiccionales no se suspendió ninguna vista, aunque más de cuarenta declaraciones en diferentes procedimientos se aplazaron para otro día. Entre las declaraciones que se suspendieron se cuenta la de dos cargos de la Consellería de Facenda en unas diligencias por coacciones a la inquilina de un piso, tras una querella del fiscal contra la secretaria xeral técnica y el subdirector de Patrimonio. Jueces y fiscales protagonizaron una concentración ante el edificio judicial de O Couto, en la que el decano y el fiscal jefe, Leonardo Álvarez y Florentino Delgado, respectivamente, leyeron el manifiesto con sus reivindicaciones. La defensa del Estado de derecho y la separación de poderes figuran entre las «poderosas razones» para esta movilización, que también incluye mejoras de carácter salarial.

En las comarcas de Deza y Tabeirós solo se suspendieron actividades en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de A Estrada, donde llegaron a aplazarse cuatro señalamientos, tres de ellos audiencias previas y el cuarto un juicio de un procedimiento ordinario.

Más personal y más medios para salir del bloqueo actual

J. m. p.

Lo denuncian los propios profesionales. Los presidentes de los tribunales superiores de Justicia han vuelto a poner sobre la mesa sus reivindicaciones para acabar con lo que definen como graves carencias crónicas que sufre la Administración de Justicia. Aseguran los altos representantes del Poder Judicial en cada comunidad que la situación «es insostenible». Las asociaciones de jueces y fiscales que convocaron el paro de ayer denuncian la situación crítica que atraviesa la Justicia en España, «por anticuada, obsoleta, insuficiente y lenta». El retraso en los procedimientos de la Justicia contrasta con los avances tecnológicos de los que ya disponen otras áreas de la Administración del Estado.

más recursos humanos

Hacen falta más jueces. Galicia, por ejemplo, tiene 350 jueces en activo, pero hay órganos judiciales que arrastran un colapso que parece difícil que vayan a poder superar. El presidente del Tribunal Superior de Xustiza, Miguel Ángel Cadenas, ve difícil una solución para el caos, sobre todo teniendo en cuenta que hay que recuperar el trabajo y el tiempo perdidos durante la huelga de funcionarios que duró tres meses. Aquel conflicto provocó un tapón en muchos juzgados que aún no ha empezado a solucionarse. La Xunta asegura que el refuerzo voluntario y remunerado realizado por los funcionarios ha logrado poner en marcha el plan de recuperación en lo que se refiere al primer escalón de los asuntos que entran cada día en los juzgados. Se refiere a las notificaciones y citaciones. Pero cuando se soluciona ese problema, el tapón se traslada de sitio y llega el momento de los jueces. Pero no hay jueces disponibles para realizar los autorrefuerzos que les piden. «No sé de dónde vamos a sacar los jueces», se lamenta el presidente del Tribunal Superior.

juzgados colapsados

El sistema puede resentirse. Es la advertencia que lanzó Cadenas en la apertura del año judicial. Recordaba que desde el Poder Judicial se alertaba de que más del 60 % de los órganos judiciales españoles «están claramente sobrecargados» y que si la situación se prolonga «el propio sistema puede resentirse». Desde el Tribunal Superior de Xustiza se recuerda que la Justicia necesita de una profunda reforma organizativa y una modernización de sus herramientas e instrumentos, con la definitiva implantación de la Justicia digital y la mejora del sistema de gestión procesal.

Con información de E. V. Pita, A. Mahía, E. G. Souto, P. Seoane y Rocío García.