Portugal, el cisne de Europa

Sara Carreira Piñeiro
sara carreira REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

MANUEL DE ALMEIDA

En este siglo el país luso despegó, y pasó del puesto 48.º al 13.º en primaria a la vez que ganó treinta puntos en PISA

12 nov 2018 . Actualizado a las 19:50 h.

En lo que llevamos de siglo XXI, Portugal ha dado un salto espectacular en su educación: pasó del puesto 48.º al 13.º en matemáticas en primaria; redujo el abandono temprano del 41 % al 13,7 %; y es el único país de PISA, junto a Catar, que en cada edición hay menos alumnos suspensos y más sobresalientes. Estas son algunas de las claves de su educación:

Líneas generales

Preescolar en ascenso. Con el fin de minimizar las diferencias de partida por clase social (el 10 % más acomodado tiene un rendimiento cinco veces superior al 10 % más desfavorecido), en Portugal se ofrecen dos años de guardería gratuitos.

Muchos años. Una vez en primaria, es de los sistemas con más años de educación obligatoria y gratuita: de los 6 a los 18. Tiene tres ciclos: de los 6 a los 10 años, de los 10 a los 12 y de los 12 a los 15; a partir de entonces se puede elegir entre cursos generales (hacia la universidad), tecnológicos (como FP, aunque se puede pasar a la universidad) y artísticos.

Educación pública. Casi el 83 % de los niños acuden a colegios públicos y solo hay un 4 % de concertados.

Porcentaje estable del PIB. La crisis golpeó a Portugal, pero aguantó sin bajar en exceso la inversión en educación. Ahora está en el 5,1 % de su PIB (España está un punto por debajo).

Más pedagogía para los docentes. Es necesario cursar un máster de corte pedagógico para ejercer, desde infantil a secundaria. Los profesores de secundaria cursan su grado y un curso de entre 4 y 6 años. Las prácticas es habitual desde el primer semestre de carrera. Y los profesores de primaria (la etapa más mimada por el sistema) deben hacer exámenes de Lengua y Matemáticas. Todos tienen formación continua obligatoria, refuerzo en ciencias y formación específica en metodologías innovadoras.

Formación específica para dirección. Se ha pasado del modelo de elección por parte del claustro a uno de formación obligatoria y con más atribuciones.

Poder de los ayuntamientos. Desde el 2008, los ayuntamientos tienen más participación en la financiación de las escuelas y puede contratar personal no docente.

cómo son las clases

Lo más importante, los cuatro primeros años. El refuerzo de estos cursos ha sido mayor y constante para garantizar unas bases equitativas que puedan sustentar todo el sistema.

Más horas de Matemáticas. Se ha aumentado de forma considerable las horas de Matemáticas (tienen 275 al anuales, frente a una media de 157 en la OCDE), pero además se ha incrementado el grado de exigencia, tanto a alumnos como a profesores. Estos tienen que presentar su objetivos al inicio de curso y comprobar qué han cumplido al final.

Programas propios de mejora. Las escuelas diseñan sus propios programas de mejora en la materia.

Clases de refuerzo desde los nueve años. El sistema intenta evitar que los alumnos rezagados vayan aumentando la brecha con el resto cada curso que pasa. De ahí que se preparen programas de refuerzo desde los nueve años.

Evaluaciones en Lengua y Matemáticas, no en Ciencias. A los doce años hay un examen externo de Matemáticas y Lengua Portuguesa (había uno a los diez, pero lo quitó el Gobierno de António Costa).

Sin deberes ni repeticiones. No son muy habituales los deberes como se conocen aquí en España y no se permite repetir hasta el tercer ciclo, para evitar que los alumnos se desmotiven.

Menos abandono temprano

Como los estudiantes repiten menos, se ha reducido el abandono temprano, aquellos que no terminan la enseñanza obligatoria, que ha pasado de un 41 % al 13,7 % y aún así, a pesar de que los niños con más carencias siguen en el aula, los resultados en PISA no son malos. En España, la tasa de abandono está en el 19 %.

Docentes respetados y queridos. Aunque en Portugal no se tutea a los profesores, en cuarto de primaria la encuesta TIMSS (mide los conocimientos en matemáticas) señala que son los docentes más queridos por sus alumnos. Cuando un profesor empieza a ejercer, gana un 20 % más que un médico.

pisa

Un curso en seis años. Desde el año 2006 al 2015, Portugal ha mejorado 30 puntos en PISA, que supone un curso académico.

Mejor que España. La última edición de PISA dejó a Portugal muy por encima de España: 7 puestos en Ciencias, 3 en Lectura y 3 en Matemáticas.

«En cálculo son superiores», dice una profesora de Monforte

María Jesús Casado es profesora de Matemáticas del IES Daviña Rey, de Monforte, y lleva cinco cursos trabajando en proyectos conjuntos con Sonia Barbosa, docente de un centro de Barreiro (distrito de Setúbal), cerca de Lisboa. Lo hacen en la plataforma ETwinning y siempre buscan un tema común en sus asignaturas para compartirlo. Lo hicieron con Comparte Geometría 3D (curso 2014/15), Tips de movilidad España-Portugal (15/16), Factoriza tu dieta (16/17) e Hydraula (17/18). Este año aún está sin determinar porque tanto Casado como Barbosa cambian de curso en cada ejercicio y encajar currículo y horarios puede ser francamente difícil. La experiencia, explica Casado, es tan buena para ellas y sus alumnos que «todos los años intentamos encajar algo», a pesar de las dificultades, derivadas de los muchos frentes que una y otra abordan. Como no suelen poder viajar, las clases en común las hacen virtuales. ¿Hay diferencia entre un país y otro? «Tal vez ella suele tener más alumnos por aula, más de treinta a veces, pero es que nosotros en Monforte tenemos pocos», explica. Pero donde sí se nota es en que «en cálculo los alumnos portugueses son superiores» a los gallegos, tal vez porque «tienen unas pruebas externas que tienen que preparar y les exigen mucho».