Dos años y siete meses de cárcel para un médico del Sergas por ver una historia clínica sin autorización

x. m SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

CAPOTILLO

Será inhabilitado durante seis años para el ejercicio de su profesión.

12 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El doctor Manuel Alonso Usero ha sido condenado por la sección compostelana de la Audiencia Provincial a dos años y siete meses de cárcel por un delito contra la intimidad por haberse valido de su trabajo en el Sergas para acceder sin autorización a la historia clínica de un hombre con el que mantenía un enfrentamiento anterior y con el que ya se había visto en los tribunales. El médico tendrá además que indemnizar al perjudicado con 1.500 euros y será inhabilitado durante seis años para el ejercicio de su profesión.

El tribunal ha considerado probado que los días 23 y 29 de junio del 2011 Alonso Usero accedió a la historia clínica electrónica de Juan Madrigal «con la intención de conocer su estado de salud, en concreto, la existencia de un parte de baja por incapacidad temporal laboral», y que su actuación se produjo «sin que existiera razón asistencial alguna y sin consentimiento ni conocimiento del afectado», señala la sentencia.

Al superar los dos años, la condena haría que el médico tuviese que entrar de forma efectiva en prisión y no se pudiese beneficiar de ninguna suspensión. Sin embargo, la sección sexta de la Audiencia Provincial, la que tiene su sede en Santiago, solicita al Gobierno expresamente en la sentencia que tramite la concesión del indulto para el condenado, ya que considera que ha pasado mucho tiempo desde que se produjeron los hechos y no consta que el perjudicado hubiese sufrido consecuencias mayores que las de la mera intromisión en su intimidad, sin que esta información le haya generado más perjuicios. El tribunal, además, destaca que los hechos juzgados se encuentran «en el rango inferior del estándar de gravedad» que estipula la ley en este tipo de casos.

La Fiscalía solicitaba para el doctor Alonso una pena sustancialmente mayor de la que finalmente ha recibido, ya que pedía tres años y medio de prisión, multa de 6.100 euros y una indemnización de 2.000.

Doce pleitos anteriores

Este pleito entre el médico y Juan Madrigal podría calificarse como la punta del iceberg del enfrentamiento que ambos mantenían desde que coincidieron en una empresa de prevención de riesgos laborales. Allí, el doctor acabó siendo nombrado administrador judicial de la firma y desalojó de su despacho a Madrigal, que era el director gerente. Esas desavenencias han derivado en una docena de litigios.

En el juicio, Alonso Usero admitió haber accedido a la historia clínica del denunciante, pero dijo que lo hizo «por curiosidad» y para comprobar si estaba de baja, dado que un extrabajador de la empresa le había hecho una consulta porque dudaba de la legalidad de una baja laboral que había presentado Madrigal.

El perjudicado dijo que el conflicto con el ahora condenado le supuso una investigación judicial para comprobar si las bajas laborales que presentó eran falsas, algo que afectó negativamente a su carrera y frenó un ascenso.