Feijoo califica de «desacertadas» las declaraciones de Durán y pide «moderación»
11 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Con un solo grito contra el machismo institucional, varios cientos de personas, entre las que había simpatizantes de colectivos feministas, representantes políticos y ciudadanos anónimos, se movilizaron ayer en Pontevedra. Lucía Muradas, jefa del Servicio de Igualdad de la Diputación de Pontevedra, fue la encargada de poner voz a un concentración en respuesta a las declaraciones del alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán (PP), en las que tachaba de «chacha para todo» a Carmela Silva, presidenta de la Diputación. «Se lle quedase un pouco de dignidade política retractaríase das súas palabras e, seguidamente, presentaría a súa dimisión», dijo Muradas.
Lo cierto es que Carmela Silva optó por no participar en la concentración, pese a que, según reconoció, «o corpo pedíamo». En este sentido, explicó que «non son eu, somos todas. E porque non vou consentir que as mesmas voces que non teñen pudor ningún en faltar ao respecto ás mulleres, denigralas, ofendelas ou amparar este tipo de actitudes incomprensibles no século XXI poidan utilizar a miña presenza para acusar de novo á presidenta da Deputación de calquera tipo de protagonismo».
En cualquier caso, Carmela Silva se mostró convencida de que «os insultos machistas do alcalde de Vilanova, que pretendían ofenderme como muller, en realidade a quen ofenden é aos milleiros de mulleres que todos os días teñen que aguantar comportamentos impresentables como o deste señor, e non teñen as oportunidades que polo meu cargo eu si dispoño para denuncialo». De igual modo, asumió que el de Gonzalo Durán «non é o primeiro ataque, o primeiro insulto, e tamén sei que tampouco será o último, nin para min nin para moitas mulleres».
A este respecto, según trascendió ayer, el pasado martes por la tarde se interpuso en el juzgado de guardia de Pontevedra la comprometida denuncia de la Diputación contra el regidor municipal de Vilanova de Arousa.
Feijoo habló ayer
Mientras, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, se limitó ayer a calificar de «desacertadas» las declaraciones de Gonzalo Durán sin aclarar si el Partido Popular tomará alguna medida sobre esas declaraciones. No parece que lo vaya a hacer a tenor de su breve reflexión posterior. Al igual que el resto de los dirigentes populares, Feijoo, tras reprobar la reacción del alcalde, puso de relieve el tono «bronco» habitual que se vive en el Concello de Vigo, y en concreto criticó las permanentes descalificaciones hacia la portavoz municipal del PP, Elena Muñoz.
Tras remitirse a las «auténticas barbaridades» que asegura que escuchó en el debate del estado de la Autonomía, el presidente de la Xunta y del PP gallego pidió «máis moderación e respecto, menos críticas e menos disputas partidistas».