El sábado acaba el tiempo veraniego

Xavier Fonseca Blanco
xavier fonseca REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

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Este fin de semana regresan a Galicia la lluvia y el frío

04 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La atmósfera se está preparando para dar uno de sus habituales giros de 180 grados. El fin de semana regresa a Galicia la lluvia y el frío. Pero hasta entonces las condiciones seguirán siendo veraniegas. Este miércoles las temperaturas volvieron a marcar valores muy elevados para la época del año. En el municipio pontevedrés de Arbo se alcanzaron 34,3 grados y en la localidad ourensana de Leiro 33. Incluso en la costa norte el termómetro subió hasta los 29 grados, como ocurrió en Ferrol. Este jueves el calor será otra vez generalizado. Se esperan máximas por encima de los 25 grados en la mitad norte y superando fácilmente los 30 en la mitad sur.

Menos agradables están siendo las temperaturas nocturnas. La combinación de anticiclón y cielo despejado siempre favorece que el calor que emite la Tierra escape directamente hacia el espacio. Las mínimas comienzan a ser muy bajas, sobre todo en el interior de la comunidad, donde el mercurio ya descendió por debajo de los cero grados. Estos días el contraste térmico entre la máxima más alta y la mínima más baja alcanza los 34 grados.  

Corredor de aire frío

El fin de semana el anticiclón de las Azores se va a desplazar ligeramente hacia el oeste. Al mismo tiempo se va a formar una borrasca que situará su centro de acción sobre Francia. Las altas y bajas presiones crearán un corredor de vientos del norte que se encargarán de transportar hasta Galicia una masa de aire frío. Ese aire gélido provocará un notable descenso térmico, sobre todo de las temperaturas máximas. En A Coruña los 25 grados de hoy se convertirán en 18 el fin de semana. En Ourense el desplome podría ser de hasta diez grados. El domingo el termómetro apenas superará los 21 grados.

Las bajas temperaturas coinciden además con la llegada de un frente, el primero en varias semanas. Las lluvias afectarán a toda la comunidad aunque caerán con más frecuencia e intensidad en la mitad norte. Estas precipitaciones serán de tipo chaparrón, por tanto intermitentes y vendrán acompañadas de granizo y aparato eléctrico.

A medio plazo la incógnita reside en saber si este cambio meteorológico es solo algo pasajero o marca un cambio de tendencia, lo cual no sería ninguna sorpresa porque el aire frío de origen polar comienza a tomar el control del hemisferio norte debido a la disminución progresiva de la radiación solar. La respuesta la tiene el anticiclón. Y sobre su evolución los diferentes modelos no terminan de ponerse de acuerdo. El europeo apuesta por una disminución de la influencia del sistema de altas presiones. Esto permitiría que las borrascas asumiesen más protagonismo del que tienen ahora mismo. Pero el modelo americano señala justo lo contrario, un nuevo reforzamiento del anticiclón oceánico. Habrá que esperar unos días para saber si finalmente el otoño reclama su espacio o el verano se resiste a abandonar a los gallegos.