El ladrón de Vilalba era el albañil

TANIA TABOADA LUGO / LA VOZ

GALICIA

CARLOS CASTRO

Un hombre de 54 años fue detenido por llevarse 25.000 euros de la casa en la que trabajó. Escondía el dinero en un hueco de la pared de su vivienda

30 sep 2018 . Actualizado a las 21:43 h.

Un día después de que la familia de Emérita González Hermida, la mujer que hace una semana echó en falta 25.000 euros de su casa de Vilamartín de Rioaveso, en Vilalba, la Guardia Civil detuvo un hombre como supuesto autor del hurto. La mujer, de 74 años, telefoneó a su hija y esta alertó al cuartel del instituto armado, cuando comprobó que el dinero había desaparecido del armario en el que lo guardaba.

El arresto tuvo lugar a las siete de la tarde del viernes, y el detenido es Guillermo Gil Río, también vecino de Rioaveso, de 54 años de edad, que hizo labores de albañil y de leñador en la casa de Emérita. Este hombre, que padece de párkinson y recibe una pensión por incapacidad laboral, ya tuvo algún que otro problema, pues fue sancionado por estar cortando y vendiendo leña pese a su invalidez.

Pero este individuo no solo está detenido por ser el presunto autor de esta desaparición en casa de Emérita González, sino que también fue arrestado por otro supuesto robo con fuerza en el bar-tienda Empalme, ubicado también en Vilamartín de Rioaveso y justo al lado de su vivienda.

Tres días antes de llevarse, supuestamente, el dinero dela casa de su vecina, este hombre se personó en el mencionado establecimiento y, tras romper un candado, sustrajo cinco cajas de refrescos, dos de gaseosa, cinco de cervezas y quince sacos de pienso para perros, lo que supone 43 latas, 45 botellas de cerveza y 45 latas de refresco de cola. El hombre se delató él solo, puesto que tras coger el saco de pienso, este se le rompió por la parte inferior y fue esparciendo el material por todo el trayecto hasta llegar a su casa.

En el caso de Emérita González, la afectada explicaba lo ocurrido a La Voz el pasado lunes e indicaba que no podía achacarle a nadie la autoría del robo porque no tenía pruebas para ello. Sin embargo, ya adelantaba sus sospechas, unas conjeturas que ahora coinciden, pues el detenido realizaba trabajos en su vivienda. Esta vinculación le permitió tener un amplio conocimiento de la mujer y de su entorno más cercano, así como de la casa y del lugar aproximado en el que guardaba el dinero. 

Guardia Civil

Denuncia a los tres días

Al día siguiente de que La Voz publicase la desaparición de los ahorros de Emérita, su nieta indicaba que esperaban a presentar la denuncia porque que el dinero podría aparecer. Restaba importancia a la posibilidad de un robo e indicaba que probablemente su abuela lo escondiera en otra parte de la casa y no se acordara del sitio. Pero tras una búsqueda tan exhaustiva como infructuosa, el jueves la familia se presentó en el cuartel de Vilalba para denunciar la desaparición. En ese momento, la Guardia Civil inició una investigación y en menos de 24 horas dio con el autor.

En el registro domiciliario efectuado en la vivienda del detenido, la Guardia Civil intervino 20.800 euros, en billetes de 100 y 50. Estaban ocultos en un hueco de la pared del desván de su vivienda, así como otros objetos de procedencia supuestamente ilícita. Estaban fraccionados en 375 billetes de 50 euros y en 22 de 100. La operación la esclareció el equipo de investigación de la Guardia Civil de Vilalba en colaboración con los agentes de seguridad ciudadana del mismo cuartel. La investigación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones. 

Más seguro en casa

Emérita González había acudido a la entidad bancaria en la que tenía depositados sus ahorros (correspondientes a su pensión y a las ventas de animales) en dos ocasiones para retirar el dinero porque consideraba que en el interior de una cartera, en un bolso y en un armario de su casa estaban mucho más seguros.