Fallece en la cárcel el hombre que asesinó a su mujer a cuchilladas en una cama del hospital de Ourense

s. martínez VERÍN / LA VOZ

GALICIA

Miguel Villar

Aniceto Rodríguez Caneiro cumplía una condena de 31 años de prisión

30 sep 2018 . Actualizado a las 20:05 h.

Aniceto Rodríguez Caneiro, el hombre que asesinó a cuchilladas a su mujer, Isabel Fuentes, en mayo del 2015 en una cama del Complexo Hospitalario de Ourense, falleció hace unos días a consecuencia de un fallo cardiovascular en la cárcel de Pereiro de Aguiar, en Ourense, donde estaba recluido.

Rodríguez cumplía una condena de 31 años de prisión como autor de este crimen. La pena fue impuesta por la Audiencia de Ourense. El hombre, de 80 años, mató a su mujer, de 66, en una habitación del hospital ourensano en la que ella convalecía con graves lesiones, un mes después de que intentase acabar con su vida a martillazos en el domicilio conyugal de Verín, donde pretendía fingir un robo.

El Tribunal Superior de Xustiza ratificó en su día la pena por un delito de asesinato en grado de tentativa (12 años), y otro de asesinato consumado (19 años). El crimen movilizó a la mayor parte de la sociedad verinense, indignada por los hechos. La mujer asesinada era una persona muy conocida y apreciada en el pueblo. 

La actuación de la jueza

Una de las consecuencias del asesinato fue la presentación de un recurso contencioso por parte de la familia para determinar si la jueza instructora, María Victoria Fernández Viforcos, pudo cometer una falta grave al no ordenar medidas cautelares contra el marido tras la primera agresión en la casa familiar.

El pleno de la sala de la contencioso administrativo del Supremo determinará a principios de octubre si ha lugar a la apelación de la letrada de los familiares de Isabel Fuentes y se reabre un expediente disciplinario contra la magistrada Fernández Viforcos.

El primer recurso de los familiares fue desestimado por el Tribunal Superior, que concluyó que no había indicios de que la jueza hubiera incumplido sus obligaciones. Ello sucedió pese a los informes de la Guardia Civil que apuntaban desde el primer momento a que el marido podría ser el autor del primer ataque en la casa familiar de Pazos.