Secundaria vuelve a las aulas con 82 nuevos centros en programas de idiomas
GALICIA
El lunes comenzarán el curso 92.300 alumnos de ESO y 30.500 de bachillerato
15 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El lunes, 147.439 adolescentes comienzan las clases en Galicia, y lo harán con la ciencia, la igualdad entre sexos y los idiomas en el horizonte. Eso es lo que pretende la Xunta y lo que poco a poco se va a haciendo realidad. Por ejemplo, ya hay más de 400 centros plurilingües en total (de los más de 1.200 en Galicia entre públicos y concertados). La comunidad tiene tres programas para fomentar los idiomas que movilizan a cientos de centros gallegos y que este curso cuentan, solo en secundaria y bachillerato, con 82 nuevas incorporaciones: clases extras de otro idioma para presentarse gratuitamente a las pruebas de nivel oficiales (Cuale), una asignatura o asignaturas concretas en otra lengua (secciones bilingües) y un tercio de las materias en un idioma extranjero (plurilingües).
En cuanto al inicio de curso, los datos que maneja Educación son que el lunes 92.285 jóvenes acudirán a las aulas de secundaria obligatoria (ESO) y prácticamente el 70 % lo harán en institutos y colegios públicos, un 27,5 % entrarán en colegios concertados y un 2,6 % volverán a la rutina escolar en centros totalmente privados. Un 8,7 % del alumnado no tienen nacionalidad española.
Lo que resulta llamativo es que casi el 70 % de los ayuntamientos gallegos no tienen centros donde se imparte bachillerato. Y sobre el 40 % tampoco tienen un instituto o colegio donde se enseñe ESO. La situación es especialmente complicada en Ourense, como cabría esperar: hay unos setenta concellos sin centros de infantil, primaria ni secundaria, y casi ochenta que carecen de un lugar donde se enseñe el bachillerato.
Esta última etapa antes de los estudios superiores cuenta en Galicia este año con 30.494 alumnos y alumnas, una cifra ligeramente inferior a la del curso pasado. La práctica totalidad de los estudiantes de esta enseñanza optan por institutos públicos, ya que en los colegios concertados, donde la educación obligatoria debe ser gratuita, el bachillerato no tiene subvención y por tanto los padres pagan la totalidad de la matrícula.
