Los montes gallegos servirán para testar este sistema, en el que la Universidade de Vigo -de la que ha salido la startup Alén Space- se encarga del diseño de los sensores que se instalan en tierra, así como de todo lo que tiene que ver con el satélite, que lleva por nombre Lume I y que está previsto que se lance a finales de este año. También son los responsables de la estación terrestre que controla el nanosatélite.
La Universidade do Porto se encarga de todo lo que tiene que ver con el sistema de drones, mientras que el Centro Nacional de Investigación Científica de Francia es el que está al frente del software de modelización a partir de los datos recabados por los drones. El proyecto, que se desarrollará hasta el 2019, tiene una inversión de cerca de dos millones de euros.