Cerca de 11.000 empleados de la Xunta se acogen a las medidas de flexibilidad horaria

rebeca cordobés / m. s. REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

MIGUEL VILLAR

Otros 296 trabajadores se han apuntado al teletrabajo

22 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La flexibilidad horaria en el trabajo es un sueño al alcance de pocos. Entre los afortunados se encuentran los empleados de la Xunta, que en el 2014 puso en marcha esta fórmula, junto a la del teletrabajo, para facilitar la conciliación de la vida laboral, familiar y personal. Desde ese año, el número de funcionarios que se acoge a estas modalidades no ha dejado de aumentar. Según los últimos datos, a 31 de julio, 10.649 trabajadores de la Administración se acogen a la flexibilidad, 416 más que en diciembre del 2017, y otros 296 prestan servicio mediante el teletrabajo.

Quienes que se benefician de esta medida deben estar en su puesto de trabajo en una franja fija, de 9 a 14.30 horas, pero pueden ubicar las dos horas de jornada restantes según sus necesidades, siempre entre las 7.30 de la mañana y las 18.30 de la tarde, o incluso hasta las ocho si el centro laboral está abierto. Esta flexibilidad es automática, esto es, se concede a todos los empleados que la solicitan sin la necesidad de que cumplan ningún requisito. Actualmente, hay 9.334 personas acogidas a esta fórmula, la mayoría (64,18 %) mujeres.

Sin embargo, hay otra modalidad que se concede a los trabajadores que alegan motivos de conciliación, bien sea por tener hijos menores de 12 años o personas dependientes a su cargo. La diferencia en estos casos es que los empleados no tienen que cumplir la franja fija, excepto en aquellos casos en que sea necesario, y pueden elegir el horario más conveniente entre las 7.30 de la mañana y las 18.30 de la tarde. Hasta ahora, 1.360 funcionarios lo solicitaron. El 71,02 % fueron mujeres, un dato que visibiliza que aún se mantiene el rol de la mujer como cuidadora de niños y mayores.

Otra opción, más exclusiva, es el teletrabajo, es decir, prestar servicio desde casa mediante el uso de las tecnologías, siempre que la naturaleza del empleo lo permita y como máximo durante tres jornadas a la semana. Son 296 los funcionarios que se acogen a esta modalidad. Del total, 174 corresponden a prórrogas de empleados que ya estaban suscritos a esta fórmula reservada a informáticos, asesores jurídicos, cuerpos de inspección, traductores y otros puestos que puedan ser desempeñados con un grado alto de autonomía y a distancia.