El caso Orquesta queda literalmente en papel mojado al inundarse los archivos

Juan Ventura Lado Alvela
j. v. lado CEE / LA VOZ

GALICIA

Ramón Vigo sigue a la espera de que se resuelva un auto
Ramón Vigo sigue a la espera de que se resuelva un auto JOSE MANUEL CASAL

Varios alcaldes de la Costa da Morte fueron detenidos por supuesta corrupción política

19 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La tromba de agua caída en A Coruña el pasado 30 de junio, además de imágenes muy llamativas y cuantiosos daños materiales, supuso la inundación del edifico de Tabacos y, con ella, el deterioro de un número indeterminado de expedientes judiciales. Casualmente, entre los afectados hay un asunto que, por todos los avatares que ha sufrido a lo largo de los últimos siete años, pondría a prueba la imaginación del más avezado de los autores surrealistas. Se trata de lo que en su día se conoció como operación Orquesta, con varios alcaldes de la Costa da Morte detenidos por supuesta corrupción política y que poco a poco se ha ido reduciendo a poco más que una operación charanga, porque han quedado exculpados todos los investigados de Fisterra y Corcubión, así como buena parte de los de Cee y Mazaricos.

Sin embargo, media docena de personas, entre ellas el regidor ceense, el independiente Ramón Vigo, siguen a la espera de que se resuelva un asunto que revolvió los cimientos políticos de toda una comarca a finales de enero del 2011, va ya para ocho años. Pues bien, después de los múltiples cambios de jueces, el cierre en falso de la instrucción y los viajes de ida y vuelta de los expedientes entre Corcubión y la Audiencia Provincial, ahora, cuando se suponía que se iba a fijar la fecha del juicio oral, lo único que tienen claro es que se exponen a nuevos retrasos.

Desde la sección segunda de la Audiencia Provincial se les ha dado traslado a las partes de que los tomos 26 y 27 que estaban pendientes de llegar desde Corcubión, debido a los recursos de apelación que faltaban por resolver, llegaron el pasado 22 de junio. Sin embargo, también se les ha comunicado que el personal de mantenimiento da cuenta de que «se han inundado los archivos [...], procediéndose al traslado a otras dependencias, y que en principio, parece haber quedado todo inservible». En la misma diligencia también consta que en las oficinas hay 27 tomos, la caja de las escuchas policiales y varias más numeradas. De ahí que ahora deba determinarse -y tampoco resulta sencillo porque el sumario es muy voluminoso- qué es lo que hay y qué falta, hasta el punto de que se puede hacer necesaria una reconstrucción de la causa, con lo que eso implica.