La valedora defiende en el Parlamento gallego que no intercedió para favorecer a ninguna candidata

GALICIA

Xoán A. Soler

El PP da por buenas las explicaciones y deja entrever que votará en contra de su salida el martes, mientras la oposición pide su inmediata dimisión

05 jul 2018 . Actualizado a las 17:13 h.

Milagros Otero, la valedora do Pobo acusada en una sentencia del TSXG de «arbitrariedad» y «desvío de poder» para favorecer a una candidata en una plaza, ha comparecido esta mañana en el Parlamento gallego para defenderse de las contudentes acusaciones de un fallo judicial que han puesto en entredicho la integridad de una institución que, precisamente, está para proteger la igualdad de derechos. Justo antes de entrar en la comisión, sin más explicaciones a los medios, ha vuelto a insistir en que «no dimitirá» y ha dedicado su intervención a intentar probar que no intermedió para favorecer a la funcionaria María Puy Fraga, hermana del portavoz del PPdeG e hija Francisco Puy, catedrático de Derecho, y del que Milagros Otero es discípula académica.

La valedora ha enseñado los documentos que prueban que, el 24 de enero del 2016, renunció a participar en la selección de un proceso al que se habían presentado 18 personas. Y cómo decidió apartarse del proceso al ser una de las aspiranes la hija de su mentor académico. Milagros Otero ha insistido en que, aunque la sentencia aprecia indicios de que intervino en la selección, este asunto no queda probado. Y ha defendido que los criterios de selección estaban ya previamente definidos y que no fueron modificados con posterioridad, tal y como consta, sostuvo, en los documentos entregados a a la Cámara.

En su intervención, para tratar de negar su intermediación en favor de la candidata, Milagros Otero se ha referido también a que los méritos añadidos para la plaza, los cuales, ha insistido, estaban detallados con anterioridad. En la defensa de su inocencia, la valedora ha presentado hasta siete documentos. «Queda probado que os criterios foron seleccionados con carácter previo á convocatoria», ha insistido la valedora en su comparecencia parlamentaria. Milagros Otero ha precisado que esta era una plaza de libre designación y que la convocatoria pública se hizo así en aras de ofrecer garantías y transparencia. «Non comparto os indicios que se sinalan», ha dicho sobre una sentencia que, asegura, ha acatado, pero que la institución está estudiando recurrir.

El próximo martes se celebra un pleno que debatirá si la Cámara reprueba a la valedora y la obliga a irse. Para ello serían necesarios 45 votos favorables, es decir, que no basta el respalado de los diputados de la oposición. De ahí que la posición del PP hoy ante las explicaciones fuese de gran trascendencia. La diputada Paula Prado ha despejado las dudas. Y ha agradecido a la valedora el haber reconocido algunos errores y haber dado unas «claras e extensas» explicaciones de un asunto que está en el «ámbito administrativo, no penal». La representante del PP ha acusado a la oposición de importarle poco «la verdad» y ha insistido en que estamos ante un caso «dunha praza na que a candidata cumpría os requisitos e que era, ademáis, de libre designación». Prado ha dicho que en el proceso no solo intervino la valedora, sino más personas,

Por su parte, Montse Prado, del BNG, ha replicado a la valedora que el Parlamento no es el TSXG, y que la Cámara no está para condenar a nadie ni para atender cuestiones de índole jurídica. «O que se trata é de asumir responsabilidades políticas, non sei a que agarda vostede», ha interpelado la diputada. Para la organización nacionalista, la posición de Milagros Otero é «insostenible» porque la sentencia la inhabilita para el desempeño del cargo a ojos de los ciudadanos, que no pueden ver en su figura a alguien imparcial. «Non lle queda outra que dimitir», ha dicho.

La diputada socialista Patricia Vilán ha respondido que la sentencia solo habla una vez de indicios, que es «durísima», y ha dicho que esto «é un Parlamento, non un tribunal». Los socialistas consideran que el fallo acredita una enorme falta de transparencia en el Valedor, algo «imperdonable» en una institución para proteger los derechos fundamentales, y que la permanencia en el cargo de Milagros Otero ocasiona un daño irreparable.

Luís Villares, portavoz de En Marea, le ha pedido a Milagros Otero la «dimisión inmediata» por existir motivos de incumplimiento flagrante de sus funciones. «Vostede seguiu intervindo despois de que se apartara, como di a sentenza».