Tormentoso final de junio

a.d.p. REDACCIÓN

GALICIA

Santi M. Amil

Meteogalicia ha lanzado una alerta amarilla para hoy por tormentas que afecta a las cuatro provincias

29 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Con los bañadores, bikinis y demás a buen recaudo, Galicia se prepara para despedir el mes de junio con precipitaciones generalizadas por casi todo el territorio. Como si fuera febrero, vamos. El verano ha decidido ponerse tan de perfil que incluso Meteogalicia ha lanzado una alerta amarilla para hoy por tormentas que afecta a las cuatro provincias, especialmente a las de Lugo y Ourense. Para quienes gustan de los detalles técnicos, el motivo de tanta inestabilidad está relacionado con la combinación del aire cálido y húmedo de la superficie con las masas de aire más frío en altura. Poco consuelo supondrá esta explicación científica para aquellos que esperaban arrancar el mes de julio con días de sol y playa. Eso no será posible, al menos en Galicia.

Las tormentas de mañana serán más frecuentes a partir de las dos de la tarde y tendrán mayor posibilidad de afectar al sureste de la comunidad. Es más que posible que algunas de estas precipitaciones vengan acompañadas de aparato eléctrico y algo de granizo. Al menos no se espera un descenso significativo de las temperaturas.

La alerta amarilla está localizada únicamente en la jornada de hoy, ya que para el sábado se esperan lluvias pero no con la intensidad necesaria como para generar una alerta. Eso sí las lluvias seguirán siendo las protagonistas meteorológicas del fin de semana. La mancha de chubascos que prevé el servicio de Meteogalicia se va extendiendo por el mapa gallego a medida que avanza el fin de semana, con alcance a todo el país el domingo día 1. La temperatura también se verá afectada, a la baja, por supuesto, durante estos días que poco tienen que ver con el prometedor inicio del verano que se vivió el fin de semana de San Juan. La máxima y la mínima para el primer día de julio está prevista en Ourense con 11 y 26 grados respectivamente.

El nuevo tren de precipitaciones mejorará todavía más las excelentes condiciones en las que se encuentran los embalses gallegos con niveles de ocupación que empiezan a acercarse al límite en algunos casos y que suponen datos infrecuentes en esta época del año pero que garantizan un verano más cómodo en cuanto a las disponibilidades hídricas de la comunidad. El año pasado, acabado el verano, la sequía propició que la Administración autorizara el uso por parte de los ganaderos de algunos de los depósitos que mantiene para abastecer a los efectivos antiincendios. Pero, cuando fueron a usarlos los encontraron vacíos. Muy difícilmente se repetirá este año esa grave situación, con el índice de precipitaciones registrado y que, al parecer, no va a decaer. El nivel de humedad retrasará también la temporada de incendios.

La frecuencia de la lluvia tiene sus ventajas aunque, probablemente, los hosteleros de la costa no opinen exactamente lo mismo. Ya se sabe, nunca llueve a gusto de todos. Pero de lo que no cabe duda es que los próximos días lloverá. Y no poco. Así que si tienen la suerte de iniciar las vacaciones, dispongan de planes que no sufran al incluir el paraguas y el chubasquero.