Una tarde con 3.000 rayos en Galicia

Xavier Fonseca Blanco
xavier fonseca REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Xoán A. Soler

Las nubes han dejado cifras tan sorprendentes como los 40 litros por metro cuadrado en pocos minutos registrados en Lalín

25 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La inestabilidad en Galicia ha ido en aumento durante las últimas horas. Tal y como estaba previsto, la presencia de la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) o también conocida como gota fría, al oeste de la península ibérica, ha estado inyectando aire frío en las capas altas de la atmósfera. Ese aire gélido, combinado con el cálido, ha generado nubes de tormentas que ayer cubrieron el cielo gallego, de oeste a este y de norte a sur. Los cumulonimbos han descargado con fuerza, dejando cifras tan sorprendentes de 40 litros por metro cuadrado en pocos minutos, como ocurrió en Lalín. Las trombas de agua, acompañadas en muchos momentos de granizo, han vuelto a provocar contratiempos en las carreteras y en los centro urbanos de la comunidad. La actividad eléctrica ha sido además incesante. En pocas horas, entre las doce del mediodía y las ocho de la tarde, se registraron 3.000 rayos. La mayor parte del aparato eléctrico se concentró en el centro de Galicia.

Hoy, los chaparrones intensos serán ya generalizados y persistentes. Esto significa que también caerán por la mañana y afectarán a las zonas costeras, que hasta ahora se han librado bastante de la lluvia. Todo ello acompañado de un notable descenso térmico, que será más acusado en las provincias del norte, donde el termómetro apenas va a alcanzar los veinte grados. 

Avisos por lluvias intensas

Hoy, la Agencia Estatal de Meteorología mantiene los avisos por fuertes precipitaciones en el sur de la provincia de Lugo, en toda la provincia de Ourense y en el interior de la provincia de Pontevedra. El aviso estará activo entre las doce del mediodía y las nueve de la noche. En ese intervalo de tiempo, la lluvia podría dejar acumulados hasta quince litros por metro cuadrado en sola una hora. El granizo y las tormentas también están garantizadas.

Mañana Galicia todavía notará los efectos del aire frío en altura. Los chaparrones serán frecuentes y moderados, especialmente en la mitad norte de la comunidad, donde además volverán a descender las temperaturas, marcando valores incluso bajos para esta época del año. El domingo será una jornada algo más estable, pero con mucha humedad y sin descartar la aparición de algunas lluvias débiles en las provincias atlánticas. Los chaparrones se quedan para la semana que viene.

El 2018 está siguiendo, de momento, las pautas climatológicas, algo que hacía muchos años que no ocurría. El invierno ha sido frío y lluvioso, como tiene que serlo en Galicia, y ahora la primavera se comporta como se espera, con una meteorología muy cambiante, a veces con un tiempo estable y caluroso pero también con inestabilidad y tormentas, un fenómeno propio de la estación primaveral. Solo falta que el verano venga seco y caluroso, como suele hacerlo habitualmente en Galicia.