Adolescentes con empresa propia

Sara Carreira Piñeiro
sara carreira REDACCIÓN /LA VOZ

GALICIA

Ana Garcia

Alumnos de Cerceda crean una cooperativa con la que financian su excursión

11 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La Asociación de Empresarios de Sabón, la Diputación de A Coruña y el colegio público integrado O Cruce, de Cerceda, se han unido en un proyecto que ofrece una experiencia única a los adolescentes: la de crear su propia empresa. Cross Designs es la cooperativa resultante y ya está a pleno funcionamiento. Con una inversión inicial de 100 euros (5 por cada alumno participante) la empresa terminará el curso con una facturación cercana a los 3.000 (un 25 % irá a Cruz Roja de Ordes y el 75 %, a pagar el viaje de fin de curso). «Poderíamos seguir despois deste curso -dice Uxía Viqueira, la gerente- porque agora abrimos mercado, temos novos clientes». Una de las primeras firmas que confió en ellos fue el propio Ayuntamiento de Cerceda. Miguel Boquete, presidente de la cooperativa, se entrevistó personalmente con el alcalde, quien le encargó una serie de artículos de promoción del municipio.

Este proyecto es paralelo a otros dos similares: el de los empresarios de Bergondo con un instituto de Betanzos y el de los de Agrela (A Coruña) con el IES A Sardiñeira. Todo bajo el paraguas de la Diputación y con el objetivo de enseñar a los jóvenes una opción vital, además de ofrecerles formación en habilidades sociales necesarias pero poco practicadas: abrir una cuenta en un banco, hablar con las autoridades, presentar papeles en un notario...

Marta Marzoa, la gerente de la Asociación de Empresas del Polígono Industrial de Sabón, es quien asesora a los jóvenes de Cerceda en su proyecto emprendedor y está realmente satisfecha con el resultado: «Tenemos un aula virtual en nuestra web, donde los alumnos mandan cada progreso que hacen y me sorprende que llegan cosas a las once de la noche. Tienen un fuerte compromiso con este proyecto». Por eso, no descarta intentar ampliar el convenio o, en cualquier caso, seguir echando una mano a estos emprendedores.

Milagros Trigo, directora del CPI, cree que este tipo de programas solo tienen cosas positivas: «Les ayuda a mejorar en sus estudios, les da una soltura y aprenden cosas importantes. El notario de Ordes les dio una magnífica lección de cooperativismo». Aprenden cosas incluso de sí mismos, como reconoce Miguel Boquete: «Algúns compañeiros sorprendéronme facendo cousas que non esperaba». Para Uxía Viqueira, esta experiencia le ha servido para aprender dos cosas: «O difícil que é coordinar aos diferentes grupos para que o traballo teña o ritmo que queremos» y su vocación, que es tener una empresa de cátering.