La sardina gallega, al borde del colapso

Xavier Fonseca Blanco
Xavier Fonseca REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

MONICA IRAGO

Desde hace unos años la población de este animal en la costa gallega no solo está cayendo en picado sino que además no existe un relevo generacional

06 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Galicia se encuentra en el límite superior de un sistema de afloramiento que comienza en el noroeste de África y se extiende hacia el norte, afectando a Canarias y a Portugal. Este fenómeno natural, asociado a los vientos del norte que genera el anticiclón de las Azores, desplaza aguas frías y nutrientes desde el fondo, un ambiente que atrae a las sardinas. «Lo que hace el afloramiento es enriquecer las rías de zooplancton y fitoplancton, el alimento de las sardinas», explica Isabel Riveiro, investigadora del Instituto Español de Oceanografía en Vigo. El banco principal de reclutamiento de sardinas del llamado stock ibérico se encuentra frente a la costa norte de Portugal. «Ahí es donde crían principalmente. Después estos individuos se van moviendo en busca de un lugar para alimentarse y llegan hasta Galicia», añade Riveiro. Pero desde hace unos años la población de sardinas en la costa gallega no solo está cayendo en picado sino que además no existe un relevo generacional. «Dependemos de que o banco de Portugal medre moito para que os excedentes de sardiña veñan ata aquí. E ademais hai un problema adicional. A sardiña que atopamos en Galicia é vella. Cada ano constatamos que non hai crías, que son as que teñen que renovar o stock. Agora mesmo estamos vivindo de rendas e dende logo non estamos para manter o nivel de pesca que tiñamos hai quince años», reconoce Pablo Carrera, investigador del IEO en la ciudad olívica.

La ciencia lleva estudiando el comportamiento de la sardina en Galicia desde comienzos del siglo XX. Y en esa serie histórica tan extensa pocas veces se ha registrado una situación tan delicada «Hai dúas razóns fundamentais. Por unha banda, a pesca e, por outra, a baixa produtividade. As condicións non son as idóneas para a reprodución pero malia todo mantense un nivel de capturas por riba da taxa de renovación», apunta Carrera. La sostenibilidad de la especie está tan amenazada que no se descarta la prohibición «Siempre es una posibilidad. Hay que esperar a la evaluación de junio para ver si las medidas que se están adoptando tienen éxito para saber si se puede pescar o no», admite Riveiro.

La meteorología tampoco ha colaborado mucho este año. El anticiclón ha brillado por su ausencia y con él, los vientos del norte que producen los afloramientos.«Este ano foi atípico porque houbo moitas borrascas na época da campaña e isto propiciou un ambiente moito máis invernal, con moito vento do sur e un importante aporte dos ríos. Polo tanto o mar está máis doce», termina Carrera, que en unas semanas presentará un informe con datos numéricos sobre la situación actual de la sardina.