Detenido un hijo de Oubiña como líder de una red que importaba coches de Alemania y defraudaba el IVA

J. R. VIGO / LA VOZ

GALICIA

Oscar Vázquez

El arousano acusado tiene, con un socio que no es gallego, un negocio de venta de coches que él se encarga de traer a España

19 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Eludir el pago de IVA en España mediante una presunta trama que importaba coches de alta gama procedentes de Alemania ha dado pie a una investigación policial que afecta a las Rías Baixas. Y más en concreto a Vilagarcía de Arousa. El trabajo policial, en el que participan la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco), Vigilancia Aduanera y la Agencia Tributaria, trascendió este miércoles con el arresto de Jonathan Oubiña (hijo de Laureano Oubiña) y el registro de su vivienda en la capital arousana. El trabajo policial, que se encuentra en secreto de sumario por orden del Juzgado de Instrucción número 5 de Elche -ciudad en la que había surgido la investigación por la denuncia de un afectado-, ha ido trascendiendo a cuentagotas por ahora, igual que el número de personas implicadas. De hecho, aunque no se descartaban más detenciones este miércoles, la única constatada al cierre de esta edición es la de Jonathan Oubiña, que ocupa, presuntamente, un papel muy destacado en la trama investigada, que afecta también a otras comunidades autónomas.

El arousano acusado tiene, con un socio que no es gallego, un negocio de venta de coches que al parecer él trae a España casi siempre encargándose personalmente de completar el trayecto. Una vez aquí, y según consta en la investigación, se intenta aclarar si la forma para eludir el pago del IVA por esos vehículos responde a sociedades mercantiles creadas en Portugal aprovechando que cada país fija el tipo de IVA que considera más oportuno. Es más, el tipo de coches que se investigan por un posible delito fiscal responden a un perfil de muy alta gama. La investigación destapada responde, en el argot policial, al conocido como fraude de carrusel en el IVA.  

Patrón constante

Dicho delito responde a lagunas existentes en el actual régimen de tributación comunitario, que es transitorio desde 1993, y su patrón es siempre el mismo: una empresa A ejecuta una compra en otro país comunitario en el que se autorrepercute y simultáneamente se deduce la cuota de IVA. Posteriormente, la firma A vende dicha mercancía en el mercado interior a otra empresa B, la cual soporta el IVA de la operación, adquiriendo consiguientemente el derecho a su deducción. Sin embargo, tras realizar la venta, la empresa A desaparece sin haber ingresado el IVA repercutido al comprador, y generando así un perjuicio a la Hacienda Pública. La empresa A suele denominarse trucha, ya que siempre va a estar administrada por testaferros o personas interpuestas o insolventes, careciendo además de una estructura empresarial real, por lo que a la inspección tributaria le resultará muy complicado seguirle la pista y exigirle responsabilidades.

En el caso de la investigación que se explotó este miércoles, al menos, con la detención del arousano, se daría este caso, aunque habrá que esperar para saber el alcance del delito fiscal investigado y de las ramificaciones que se le atribuyen en el país.

El registro realizado en la casa de Jonathan Oubiña, en Vilagarcía de Arousa, tenía un objetivo capital: buscar documentación fiscal, ya sea en papeles impresos o en cualquier soporte informático que se localizase en la vivienda.

El auto de entrada y registro también deja claro que será necesario requisar cualquier arma de fuego, así como obtener copias de las bases de datos y demás ficheros informáticos utilizados por la persona señalada en la causa. De hecho, los funcionarios movilizados de la Agencia Tributaria tenían el encargo del juzgado de obtener cualquier clave de acceso a aplicaciones o a herramientas digitales para tener toda la información que fuese posible durante el tiempo que duró el registro.