Feijoo se encara con Villares tras su contundente ataque al expresidente Albor
GALICIA
«Aínda que vivira dúas vidas, non lle chegaría á altura en dignidade», le espeta el presidente de la Xunta al portavoz de En Marea
11 abr 2018 . Actualizado a las 15:33 h.La sanidad, los proyectos de las grandes infraestructuras o las inversiones del Estado en Galicia son los asuntos que marcaron este miércoles la sesión de control del Parlamento, que esta vez tuvo un invitado inesperado: el primer presidente electo de la Xunta, Gerardo Fernández Albor, destinatario de un contundente ataque por parte del portavoz de En Marea, Luís Villares, que provocó que Feijoo saliera en su defensa.
Fue después de mostrar su rechazo a la construcción de la autovía A-57, que funcionaría como una alternativa libre de peaje a la AP-9, cuando Villares se afanó en cuestionar la «falta de autoridade» del mandatario autonómico, Alberto Núñez Feijoo, para paralizar este proyecto o para explicar el supuesto «silencio» que guardan los populares en torno a una medalla concedida al expresidente Albor en su centenario «cando levaba tres anos sen traballar» como miembro del Consello Consultivo de Galicia o los contactos que mantuvo «cos narcos en Portugal».
Mientras Villares pronunciaba estas palabras, se sucedieron los murmullos y abucheos de reprobación en la bancada popular. Feijoo le dijo abiertamente que se había equivocado, y que, como magistrado en excedencia, no ofrecía garantías de que fuese a respetar en el futuro la presunción de inocencia de nadie. También invitó a Villares a revisar las intervenciones en el pleno de dirigentes nacionalistas o comunistas coetáneos de Albor, como Camilo Nogueira o Anxo Guerreiro, pues aseguró que trataron siempre «con respecto» al presidente de la Xunta, mientras que Villares optó por «mancillar» su figura.
«Aínda que vivira dúas vidas, non lle chegaría á altura en dignidade ao presidente Albor», le espetó Feijoo a Villares, recibiendo una sonora ovación de los diputados del PP. «Xa sei que no seu grupo ninguén defende a ninguén», prosiguió Feijoo, antes de pedirle al portavoz de En Marea que no intente arreglar a su costa los problemas internos de su formación.