Primer aviso por frío extremo en el interior y de posibles nevadas en la costa

Xavier Fonseca Blanco
xavier fonseca REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

MANUEL

Las mínimas descenderán por debajo de los seis grados bajo cero. Podría nevar en la costa de Lugo

06 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El tiempo propio de latitudes polares se ha instalado en Galicia. Los termómetros mantienen además una tendencia a la baja. El episodio de frío extremo vivirá su momento álgido durante los próximos dos días. Por primera vez este invierno se ha activado un aviso amarillo en la provincia de Ourense por bajas temperaturas. Las mínimas podrían caer por debajo de los seis grados bajo cero. La combinación de cielo despejado y valores negativos en el interior de las cuatro provincias gallegas provocará intensas heladas. Hasta el momento ya se han registrado cifras de 7,8 grados bajo cero en A Veiga.

El mercurio se desploma y la nieve se aproxima al mar. Hoy la cota estará sobre los 400 metros de altitud, pero irá descendiendo de forma progresiva. Durante las últimas horas de la jornada se va a situar ya en torno a los 300 metros. Mañana por la mañana alcanzará su cota más baja: solo 200 metros sobre el nivel del mar. «La posibilidad de que podamos ver algunos copos de nieve en la costa norte en Galicia es relativamente elevada, principalmente de madrugada y en las primeras horas, tanto hoy martes como mañana, miércoles. Lo que es más difícil es que esa nieve pueda cuajar en el suelo» apunta Juan Taboada, de MeteoGalicia. La zona que tiene más opciones de ver cómo la nieve se precipita sobre sus aguas es A Mariña. El manto blanco también podría cubrir buena parte de la provincia de A Coruña el miércoles, donde se ha activado un aviso en el interior por acumulaciones de hasta cinco centímetros. Las opciones de que pueda nevar en la costa coruñesa dependen directamente de las precipitaciones.

Máximas negativas

El intenso frío polar sobre la comunidad ha impedido incluso que las máximas alcanzasen valores positivos en la montaña. En Os Ancares la temperatura más alta no ha superado en ningún momento los tres grados negativos. Aunque no solo se han registrado anomalías en las zonas más elevadas. En Vigo, por ejemplo, la mínima ha estado por debajo de los dos grados y la máxima durante las últimas horas no ha conseguido alcanzar ni siquiera los cinco grados, diez grados menos que la media habitual en el mes de febrero. La temperatura máxima ha sido de tan solo 12 grados. En Lugo, ciudad donde ha nevado de forma intensa, la máxima se ha mantenido también por debajo de los seis grados

Sensación térmica

La sensación de frío que se experimenta en realidad no refleja lo que realmente marcan los termómetros. De la misma forma que la humedad intensifica la sensación de calor en verano, el viento lo con el frío hace en invierno. El aire del norte que está soplando genera una experiencia muy desagradable en muchas zonas, especialmente en la costa norte. Así, si la temperatura máxima en un determinado lugar es de cinco grados, como ha ocurrido en muchas localidades, pero el viento sopla por encima de los 90 kilómetros por hora, como también ha ocurrido, la sensación de frío da como resultado un valor negativo, en torno a los tres grados bajo cero.

Durante las próximas horas la sensación de frío también será más intensa. El viento seguirá soplando con mucha fuerza al tiempo que llega una nueva masa de aire polar más gélido. Pero a diferencia de estas últimas jornadas, el cielo no presentará tantas nubes. Esto significa que, en cuanto el sol se ponga, todo el calor que emite la Tierra se escapará hacia el espacio exterior. Sin ninguna fuente de calor, las bajas temperaturas y el viento de componente norte provocarán una sensación de frío extremo.

Un corredor de aire polar seco, pero también húmedo

Los vientos del nordeste permitirán que pueda nevar en la costa norte de la provincia de Lugo

X. F.

El anticiclón de las Azores, cuyos vientos giran a favor de las agujas del reloj, y una borrasca sobre el Mediterráneo han creado un corredor de aire polar continental y húmedo al mismo tiempo. «Tenemos una mezcla de masas de aire que ya empezó en la jornada del viernes. Es de origen ártico marítimo y ayer lunes tenía características más de polar continental, aunque recibirá una nueva inyección de aire frío marítimo a partir de hoy martes» explica Taboada. La configuración atmosférica actual es perfecta para que el mercurio pueda alcanzar valores poco habituales en nuestra comunidad. «Las temperaturas más extremas cada año suelen venir asociadas a estas situaciones. La masas de aire polar marítimo o ártico marítimo llegan más cargadas de humedad y son la que dejan nieve en cotas relativamente bajas, como está sucediendo estos días. En estos casos las temperaturas más bajas se dan en la alta montaña» añade el meteorólogo.

El aire polar continental será el encargado de provocar un notable descenso de las mínimas, sobre todo en el interior, donde se esperan fuertes heladas. Por su parte, el aire marítimo aumenta las posibilidades de que la nieve pueda caer en la costa norte. «Sí, en este caso, al tener una mezcla de diferentes masas de aire, tendremos avisos por bajas temperaturas y fuertes heladas al tiempo que se mantendrá la posibilidad de nieve, principalmente en la mitad norte» subraya.

Los vientos del nordeste permitirán que pueda nevar en la costa norte de la provincia de Lugo, pero complica mucho que pueda aparecer en otros puntos situados al nivel del mar. De cualquier formas, hay margen para las sorpresas. Durante los últimos días las nevadas han superado las previsiones. Al menos ya ha hecho acto de presencia en el interior de las cuatro provincias. Lo que suceda durante las siguientes horas dependerá de quién gane el pulso entre el aire polar marítimo y el continental. Si gana el frío y seco hablaremos de valores que podrían descender perfectamente hasta los diez grados bajo cero y un frío insoportable. En caso de que se imponga el aire más húmedo, la nieve caerá a nivel del mar en la costa lucense, incluso con posibilidad de que pueda cuajar. Si además el aire procedente del Cantábrico decide hacer un esfuerzo extra es probable que la nieve se pueda asomar a la costa coruñesa.