Inquietud en Noia tras la denuncia de una joven de que dos hombres la acosaron desde un coche

Marta Gómez Regenjo
M. Gómez RIBEIRA / LA VOZ

GALICIA

Carmela Queijeiro

Los acosadores fueron identificados y aseguraron que solo pretendían piropearla

19 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El caso de Diana Quer ha sumido a todo el territorio de Barbanza en un estado de nerviosismo que en Noia se magnificó tras la denuncia de una joven de la localidad, que declaró ante la Guardia Civil que dos hombres la habían acosado desde un coche e intentado raptarla. Finalmente, la investigación realizada por la Policía Judicial llevó a la identificación de los ocupantes del turismo y a la conclusión de que todo fue una broma de mal gusto por la que la chica, de 19 años, se llevó el susto de su vida.

Los hechos tuvieron lugar a primera hora de la mañana del miércoles. La joven se dirigía al instituto caminando y a la altura del puente de San Lázaro, un coche, un Renault Mégane de color verde, se paró a su altura y sus dos ocupantes la invitaron a subirse al turismo. Ella apuró el paso y unos metros más adelante los individuos insistieron en que subiera al vehículo. Uno de ellos llevaba puesto un pasamontañas, y el copiloto llegó a desabrocharse el cinturón de seguridad, por lo que la joven se asustó y huyó corriendo en dirección contraria. Acto seguido, se dirigió a la Guardia Civil para denunciar un intento de rapto.

A medida que lo ocurrido se fue extendiendo por Noia, se generó una gran alarma. «É terrible, agora temos que andar con moito coidado porque nunca se sabe», comentaban ayer dos jóvenes noiesas en la misma calle de la que el día antes había huido la chica de 19 años. Sin embargo, pese a la preocupación que se desprendía de las conversaciones de los vecinos, a mediodía las fuerzas del orden ya tenían bastante claro que la hipótesis del intento de secuestro era poco plausible.

A esa hora, el vehículo en el que viajaban los supuestos raptores ya estaba identificado y localizado en la villa noiesa y el oficial de la Policía Local, Francisco Fernández, apuntaba que todo parecía indicar que la denuncia de la joven se debía a una broma de mal gusto. Añadió, además, que no había evidencias de que los ocupantes del coche tuvieran intención de llevarse a la joven a la fuerza.

A media tarde, la Guardia Civil localizaba a los dos supuestos raptores. Se trata de dos hombres, uno de nacionalidad española, natural de Vimianzo, y otro senegalés que están residiendo en Noia por cuestiones laborales. Al parecer, trabajan en la industria maderera y uno de ellos llevaba pasamontañas porque es una prenda que utiliza habitualmente para protegerse del frío cuando trabaja.

En su declaración ante los agentes de la Policía Judicial, los hombres explicaron que su intención cuando se pararon junto a la chica era únicamente piropearla. Una vez aclarado el asunto, quedaron libres sin que sobre ellos pese imputación alguna, ya que no consta la comisión de ningún delito.