Santalices llama al PP a «transmitir ilusión» para reaccionar al empuje de Ciudadanos

Domingos Sampedro
Domingos Sampedro SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

xoan a. soler

Defiende que los políticos pidan disculpas por los casos de corrupción que incrementaron la desafección y causaron  «moito dano» a la ciudadanía

15 ene 2018 . Actualizado a las 13:14 h.

El presidente del Parlamento de Galicia, Miguel Ángel Santalices, emplazó este lunes al Partido Popular del que forma parte a «transmitir ilusión» a su electorado y a «encandilar» a los potenciales votantes populares como método para reaccionar al auge de Ciudadanos en algunas encuestas de opinión elaboradas tras las elecciones catalanas, en las que el partido de Albert Rivera se convirtió en la fuerza más votada.

El jefe del Legislativo gallego, que participó en el desayuno informativo del Fórum Europa, donde fue presentado por Núñez Feijoo, pidió dar «tempo ao tempo» para valorar ese jarro de agua fría que supuso para el PP ver algunos sondeos que sitúan a Ciudadanos por delante en el conjunto de España. «Vamos a ser prudentes», dijo Santalices, respecto al empuje de Ciudadanos, que dio a entender que podría ser únicamente producto de la coyuntura, pues las encuestas fueron elaboradas en un contexto en el que no está previsto que se celebren elecciones. Con todo, cree que su partido debe «encender unha chama» con su actividad política para recuperar la simpatía de los electores que decidieron darle la espalda al PP y mirar a formación como Ciudadanos.

El presidente del Parlamento fue preguntado sobre si creía que los casos de corrupción contribuyeron al desgaste del PP y a la desafección electoral hacia este partido, algo que no solo no desmintió, sino que se mostró partidario de «pedir disculpas» por unas prácticas que, a su juicio, hicieron «moito dano», pues provocaron que muchos ciudadanos dieran la espalda a la política, a los partidos y a las instituciones. Entiende Santalices, no obstante, que Galicia no tiene los problemas de corrupción de otras comunidades, como serían el caso de Madrid, Andalucía o Comunidad Valencia, pero defendió estar «absolutamente vixiantes» para evitar este tipo de prácticas.