La experiencia en una botica valdrá el doble que ahora para abrir una oficina de farmacia

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Rober Amado

Los méritos académicos tendrán también más valor

13 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Hay nueva normativa para la planificación, apertura, traslado, cierre y transformación de oficinas de farmacia. Ayer el portal de Transparencia e Bo Goberno de la Xunta publicaba el proyecto de decreto que regula esta actividad, y que ahora inicia un período de alegaciones. La novedad más importante es que la experiencia en una botica valdrá el doble que en la actualidad al pedir permiso para abrir otra farmacia.

El objetivo de que sea el conocimiento práctico el factor más valorado parece lógico: es la forma de que la Consellería de Sanidade garantice que el perfil de los adjudicatarios finales beneficie sobre todo a los usuarios, a sus futuros clientes; además, esta era una de las peticiones que se hacían desde los propios colegios, que también entendían la experiencia como piedra angular para la atención a los ciudadanos. Hay que recordar que muchos de los enfermos crónicos gallegos consultan primero en su botica de referencia antes de acudir al médico.

Todos los méritos

El mayor cambio es el de la experiencia. En este nuevo proyecto se convierte en el baremo más importante, al pasar de un máximo de 30 puntos a 60. La valoración será de 0,4 puntos por mes de servicios prestados en una oficina de farmacia (antes era de 0,04). También se tendrá más en cuenta en el epígrafe de la experiencia si esta se desarrolló en un centro de atención primaria o en un hospital; si antes esto suponía 0,01 puntos por cada mes de trabajo, ahora suma 0,15 puntos.

Se valora especialmente el ejercicio farmacéutico en centros de atención a drogodependientes. La docencia, por otra parte, es algo que tiene menos importancia en el nuevo decreto, ya que pasa de 0,5 puntos por mes a 0,4 y, si bien antes tenía una categoría propia, ahora se suma a la experiencia general.

Los méritos académicos tienen también más valor que en el decreto todavía en vigor, al poder sumarse 15 puntos frente a los 12 actuales. Esto se consigue incrementando ligeramente la puntuación obtenida en cada una de las calificaciones y sumando un plus por un premio extraordinario. En cambio, no se valora el conocimiento de idiomas, excepto en el caso del gallego, obviamente, puesto que además es un requisito legal, pero decrece (5 puntos frente a los 10 de antes).

Publicar importa menos

La formación continuada suma 10 puntos, es decir, se mantiene, al igual que el período valorable (10 años). Baja de manera ostensible la puntuación máxima por publicación, de 10 a 4 puntos, aunque se mantiene el período en diez años. Además, las publicaciones en revistas quedan ceñidas a aquellas que aparecen en la base de datos del decreto.

Una novedad es que se supedita la valoración de contratación de personal al hecho de que favorezca el crecimiento neto de dicho personal por un período mínimo de tres años; esto tendrá una puntuación de 1,5 frente a los 0,75 de antes.

La minusvalía, siempre que sea superior al 65 %, vale un punto más, hasta 4,5.