El Chicle, un «profesional de la delincuencia» que conocía el terreno

José Manuel Pan
josé manuel pan REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Así define la Guardia Civil a Abuín, un hombre que «sabía qué hacer en cada momento»

03 ene 2018 . Actualizado a las 09:29 h.

«Nos enfrentamos a un profesional de la delincuencia que sabe lo que tiene que hacer en cada momento». El coronel jefe de la UCO, Manuel Sánchez Corbí, tuvo claro desde un principio que su gente se las estaba viendo con un sospechoso que se las sabía todas. Cuando el teléfono móvil de Diana Quer apareció tirado en la ría los investigadores ya constataron que estaban ante una desaparición forzada. Y desde ese momento, se centraron en la teoría de que un desconocido se hubiese llevado a Diana de una manera violenta. Las pistas llevaron a José Enrique Abuín, el vecino de Rianxo apodado el Chicle. El coronel explica que desde el primer momento este hombre se sabía seguido y por lo tanto tomó muchas precauciones para intentar dificultar la investigación del equipo formado por agentes de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de A Coruña y de la UCO desplazados desde Madrid.

Cuando se sintió objetivo de las pesquisas de los guardias civiles, él decidió pasar a la acción. El 24 de noviembre del 2016, el Chicle agarró el toro por los cuernos y tomó la decisión de llamar a un guardia civil al que conocía de otras ocasiones en las que había tenido problemas policiales. Ambos mantienen una conversación informal en la que Abuín le dice al agente que sospecha que lo están siguiendo y le pregunta por qué. Trataba de saber qué era lo que tenían contra él. Tras esa charla, el agente informa a sus superiores y una semana después los investigadores al cargo del caso deciden llamarlo al cuartel para tomarle declaración como testigo.

Tras esa primera comparecencia ante los agentes, el Chicle ofrece incluso su teléfono móvil como prueba de que él no tiene nada que ver con ningún delito. El coronel de la UCO cuenta que el sospechoso entregó primero un teléfono que no era el que usaba habitualmente y los guardias se lo hicieron saber. Entonces él les dio el que pedían. «Pero nos lo entregó reseteado», asegura el coronel, quien señala que lo hace porque «sabe la información que se puede sacar de un teléfono móvil». Les dijo a los agentes que se lo entregaba así porque había tenido una avería y había tenido que resetearlo.

La Guardia Civil apunta otro hecho singular cuando el Chicle les ofrece sus coches para que sean revisados. Los agentes no encuentran nada. Al coronel no le extraña: «No nos va a dejar algo que lo pueda incriminar, en los coches no aparece nada».

Baliza en el coche

En algunos momentos puede parecer que el sospechoso logra esquivar las investigaciones. Sucede cuando los agentes logran una autorización judicial para colocar una baliza de seguimiento en su coche y unos micrófonos para escuchar sus conversaciones con su esposa. El coronel Corbí es muy expresivo al relatar lo ocurrido con esas escuchas: «Hablan de forma enlatada, preparada, no sale nada de nada. Insisto, nos enfrentamos a un profesional de la delincuencia que sabe lo que debe hacer. No eran conversaciones naturales». Los pinchazos telefónicos no sirvieron para nada.

El coronel resume la actitud de José Enrique Abuín con este perfil: «Estamos ante alguien que sabe que está siendo investigado y que quiere evitar cualquier sospecha sobre él. Se sabe seguido y se mosquea. Además se mueve en un terreno que conoce a la perfección».

El abogado de la defensa dice que dejará el caso si se demuestra que violó a Diana

Mantiene que la muerte de Diana Quer fue «un accidente», y califica de «falso» que su cliente reconociese a agentes de la Guardia Civil que la estrangulase

El abogado que se encarga de la defensa de José Enrique Abuín Gey, José Ramón Sierra, insistió ayer en que cree «en su inocencia» y que la muerte de Diana Quer fue «un accidente», y calificó de «falso» que su cliente reconociese a agentes de la Guardia Civil que la estrangulase. El letrado insiste en la tesis de una muerte accidental y asegura que, si se demuestra que el Chicle le mintió y que violó y estranguló a Diana, dejará su defensa.

En declaraciones a Europa Press, Sierra indicó que su cliente está «bien» y que espera poder hablar hoy con él. En la cárcel, y al haberse decretado prisión incomunicada, el Chicle no puede recibir a nadie, excepto a su abogado, ni tampoco hacer llamadas. Una vez que abandone el módulo de ingresos pasará a otro de preventivos. El abogado, tras asegurar en las últimas horas que su cliente se encuentra «afectado psicológicamente por su situación procesal», reiteró que pedirá una prueba pericial psiquiátrica sobre su estado mental.

Preguntado sobre si han definido ya la estrategia que seguirán, ha confirmado que están a la espera del resultado de la autopsia del cuerpo de la joven. «Será la que marque la línea a seguir», avanzó.