Una empresa de O Porriño, clave para descifrar que el coche del asesino de Diana Quer circuló la noche de crimen por la AG-11

e. v. pita VIGO / LA VOZ

GALICIA

EMILIO J. CERVIÑO / IAGO GARCÍA

ISV Consultores y Reconstrucciones de Accidentes investigó durante tres meses los modelos que pasaban

04 ene 2018 . Actualizado a las 16:54 h.

La empresa ISV Consultores y Reconstructores de Accidentes S. L., con sede en O Porriño, fue la encargada de investigar durante tres meses el modelo y marca de tres coches sospechosos que pasaron a la hora exacta por la escena del crimen de Diana Quer. La brigada UCO de la Guardia Civil que investigó el asesinato encargó el pasado junio a ISV que examinase las grabaciones de tres automóviles recogidas por tres cámaras. Esa era la segunda vez que la empresa porriñesa investigaba un crimen, ya que antes elaboró un informe para aclarar si un conductor del polígono de Pocomaco en A Coruña había asesinado a su esposa tras arrojarla en marcha. El estudio de los coches en el caso de Diana Quer finalizó en septiembre.

El problema es que las imágenes obtenidas en el vial de Barbanza solo mostraban «bolas de luces» en un contexto de mala visibilidad. «Fue complicado medir esos vehículos», reconoce el portavoz de ISV, Marcos Pérez. Para averiguar la marca y modelo de los vehículos, la empresa tuvo que recrear en 3D la carretera y el escenario visionado en las cámaras para dotar de profundidad a las imágenes captadas.

Para hacer una inspección de campo y obtener los datos informáticos para generar una visión en 3D, la Guardia Civil cortó durante un día la AG-11 en los tres puntos por los que pasaron los coches. En total, se movilizaron durante tres meses a tiempo completo dos empleados de ISV y un equipo de cinco guardias civiles, y para el trabajo de campo se desplegaron 12 hombres. ISV es el equipo de Reconstrucción de Accidentes de la Universidade de Vigo.

El trabajo de campo consistió en recrear el escenario en 3D y poner a circular coches virtuales «para ver si coincidían las dimensiones, las sombras, los reflejos generados por el faro o el techo del vehículo al ser iluminado por otro en sentido contrario». Las dimensiones de un vehículo son casi únicas y de ellas se puede deducir su tamaño y forma. Hay pistas como la distancia de iluminación de los faros, la altura de estos o los pilotos traseros.

La Guardia Civil hizo un encargo aséptico y «a veces no sabemos qué buscan». Las cámaras grabaron 3.000 vehículos en la franja horaria, pero la UCO solo se interesó por tres coches. «Sobre el universo de posibles vehículos compatibles, se redujeron las sospechas a dos o tres», señala Pérez. La Guardia Civil cruzó luego el resultado con sus datos y ató cabos. «Nos sentimos orgullosos de este trabajo importante, pero el resultado dependió de la investigación de la UCO en la que nosotros fuimos una pieza más del engranaje», señala Pérez.