Respuesta solidaria para la familia con tres niños que puede quedar excluida de una prestación social por 4 euros

Ana Abelenda Vázquez
A. Abelenda REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

ANGEL MANSO

La institución Padre Rubinos y la Asociación de Empresarios Autónomos de España se han puesto en contacto con Javier Sánchez y Pilar Loureiro para ofrecer ayuda

29 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La luz de la solidaridad se ha encendido para los Sánchez Loureiro, la familia en paro con tres pequeños -dos mellizos de 1 año y una niña de 2- que sigue a la espera de respuesta tras ocho meses, desde que solicitó a la Consellería de Política Social la prestación por hijo al cargo, de la que pueden quedar excluidos por un piso embargado que les obligó a presentar declaración de la renta en el 2015 por solo 4 euros.

La institución Padre Rubinos y la Asociación de Empresarios Autónomos de España (Grema) se han puesto en contacto con Javier Sánchez y Pilar Loureiro para ofrecer ayuda. «Quisimos valorar el caso de inmediato. Le preguntamos a Javier cuál era la prioridad y dijo: 'Los niños'. Les hemos ayudado con pañales y potitos, y con una compra de alimentos frescos», apuntan desde el albergue de Padre Rubinos, que valora otras ayudas para esta familia coruñesa, que insta a Política Social a darle una respuesta.

La consellería asegura que la notificación llegará «estos días» y que la familia sí ha percibido la prestación de la Tarxeta Benvida. El presidente de la Xunta, Núñez Feijoo, se pronunció ayer sobre el caso: «Política Social está traballando para saber se a situación responde ao contido do relato da familia e se os datos teñen a exactitude á que se refiren. As instrucións que temos son moi claras: nun suposto de necesidade o diñeiro está para responder a esas necesidades obxectivas. Política Social e a Axencia Tributaria de Galicia está vendo polo miúdo ese expediente, e vendo polo miúdo as axudas que cobrou, así como as prestacións solicitadas, pero evidentemente, o que non pode ser, é que esa familia non teña unha resposta concreta», informa Juan Capeáns.

La dificultad de Javier Sánchez para encontrar empleo es uno de los factores que Padre Rubinos ha considerado al volcarse con su familia. «La empleabilidad es baja por su edad [50 años] y por los años que lleva sin trabajo», consideran. Ocho años en paro que palía con la renta de inserción activa, un subsidio que se cobra un máximo de 11 meses. «Que no digan que lo que hace falta es ponerse a buscar a trabajo. Hace dos años a Javier iban a contratarlo en un lavadero de coches. Cuando le preguntaron la edad y dijo 48 cambió la cosa. Dijeron que era mayor. ¿Mayor para lavar coches?», se indigna Pilar, que valora el apoyo familiar y la respuesta social que han recibido.