Una descarga de aire polar en Estados Unidos trae una ciclogénesis a Galicia

Xavier Fonseca Blanco
xavier fonseca REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

xoan a. soler

Será el primer temporal importante de un otoño marcado por la influencia del anticiclón

08 dic 2017 . Actualizado a las 14:45 h.

Galicia está a punto de reencontrarse con su meteorología. En las últimas horas ya lo ha hecho con la lluvia, que ha dejado registros muy destacados. En localidades como Lousame o Boiro se han acumulado más de cuarenta litros por metro cuadrado. En otros municipios, sobre todo del sur de Lugo y la provincia de Ourense, ha llovido por primera vez en lo que llevamos del mes de diciembre. Pero el tiempo soleado por fin ha decidido dar un paso atrás.

Una potente borrasca se va a situar el domingo sobre la Bretaña francesa y, desde ahí, dejará lluvias intensas, fuertes vientos y grandes olas. Esta configuración atmosférica, habitual en otoño, es ahora mismo toda una novedad. Desde hace meses el anticiclón de las Azores ha impedido de forma reiterada el paso de los sistemas de bajas presiones que se mueven por el Atlántico. Una situación de bloqueo que prolongada en el tiempo ha conducido a Galicia al borde de la emergencia por sequía, a la que se podría llegar muy pronto. Al menos, el frente activo que cruzará la comunidad entre el domingo y el lunes podría permitir que aumente el nivel de los embalses gallegos. «Es difícil ofrecer una cantidad exacta, porque no lloverá lo mismo en toda Galicia. Pero un mínimo de cuarenta litros por metro cuadrado entre los dos días deberían acumularse en cualquier punto de la comunidad», comenta Juan Taboada, de MeteoGalicia.

Este sería un escenario perfecto para combatir eficazmente los efectos de la sequía. La poca precipitación que ha caído durante el último trimestre, débil y ocasional, ha favorecido que la vegetación presente un aspecto saludable, pero no ha evitado que los ríos estén más secos que nunca. La calidad hidrológica de la lluvia es un factor clave en momentos extremos como el actual. «La del domingo es una buena situación porque el pronóstico indica lluvias persistentes, generalizadas y además de intensidad moderada. Pero lo realmente importante es que las precipitaciones tengan continuidad. Esto se cumplirá a medias porque a partir del martes quedaremos en una zona intermedia y las lluvias ya serán más irregulares y frecuentes en la mitad norte. Por ello serán bienvenidas, pero con respecto a la sequía habrá que esperar para ver realmente los efectos», añade Taboada. En realidad, no parece que vaya a cambiar demasiado la situación. Serían necesarios hasta doce domingos más, como el próximo, para notar una mejoría sustancial.

Ciclogénesis explosiva

La inestabilidad del fin de semana viene de la mano de una potente borrasca que va a experimentar un proceso de  ciclogénesis explosiva. «El inicio de ese proceso podría comenzar la madrugada del domingo entre las Azores y Galicia. Pasaríamos de no tener un centro de bajas presiones formado, tan solo una ligera ondulación en las isobaras, a tener a últimas horas del domingo una caída de presión que superaría con creces los 20 milibares en 24 horas, necesarios para considerarla explosiva. Es pronto para afinar, pero es posible que cuando esté cerca de la costa de Francia su presión mínima central ronde los 975 milibares», comenta Rubén Vázquez, creador de la web Iberomet.

Frío polar en USA

El origen del temporal en Galicia está al otro lado del Atlántico, concretamente en Estados Unidos. Estos días una descarga de aire procedente del Ártico está provocando un drástico descenso de las temperaturas en la costa este del país. Detrás se encuentra el Jet Stream, la corriente que divide el aire polar del cálido subtropical. «Es el encargado de separar todo ese aire frío de las zonas templadas. Pero a veces forma curvas pronunciadas en dirección a latitudes más bajas, provocando un descenso de una parte del aire frío. Estos días se están produciendo desalojos de aire del Ártico sobre zonas templadas del hemisferio norte. Una buena parte se va a desprender sobre Europa y USA. La circulación general de la atmósfera va a impulsar parte del aire gélido en dirección a Galicia, y en su camino se va a encontrar con otro más cálido y húmedo de latitudes más bajas que permitirá la formación de la borrasca explosiva», termina Vázquez.

La llegada del temporal podría confirmar un cambio de tendencia

MARCOS MÍGUEZ

Con la cantidad de lluvia prevista para el domingo y el lunes, alguien podría pensar que Galicia comienza a ver ya la luz al final de un túnel que está siendo demasiado largo. Hay margen para la esperanza, aunque si echamos la vista atrás se impone también la cautela y el escepticismo. Solo en noviembre se acumularon 140 litros por metro cuadrado en zonas como Fornelos de Montes, pero toda esa cantidad no tuvo ningún efecto. Hoy la sequía es más intensa.

Sin embargo, algo parece haber cambiado en los últimos días. Lo importante no son las lluvias del domingo, sino lo que va a hacer después el anticiclón de las Azores. Y los modelos a medio plazo se han puesto de acuerdo para mostrar que en diciembre no se aprecia un protagonismo tan contundente de las altas presiones. Esta puede ser una clara señal de un cambio de patrón atmosférico. La próxima semana habrá un tiempo cambiante, con momentos más estables e inestables. Hasta ahora esa variabilidad parecía impensable. Desde luego este nuevo escenario es mucho más favorable para que el anticiclón se retire de una vez y permita que las borrascas encuentren el camino a casa, Galicia.