Feijoo deriva hacia José Blanco las críticas por la subida de peajes de la AP-9

Domingos Sampedro
Domingos Sampedro SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Xoán A. Soler

La oposición se alía para criticar al presidente de la Xunta por actuar de «cómplice» del incremento de las tarifas de la autopista

05 dic 2017 . Actualizado a las 20:20 h.

El debate abierto en torno a la titularidad y los peajes de la AP-9 circuló este martes sin barreras por la sesión de control del Parlamento gallego, donde los portavoces de En Marea, el PSdeG y el BNG unieron sus fuerzas para acusar a Feijoo de ser «cómplice da subida continuada» de las tarifas de la Autopista del Atlántico. El presidente de la Xunta se defendió del hostigamiento derivando la responsabilidad hacia el lucense José Blanco, último ministro de Fomento del Gobierno de Zapatero, al que señaló, sin citar su nombre, por firmar un acuerdo 48 horas antes de las elecciones generales del 2011 para que la concesionaria de la AP-9 ejecutase las obras de ampliación a cambio de poder subir el peaje en un 1 % adicional durante 20 años.

«Cando non ten solución, fala do pasado», se quejó el portavoz socialista, Fernández Leiceaga, quien, no obstante, sí admitió que fue Blanco quien firmó el convenio que derivó en el sobrecoste de los peajes, pero matizando que «debería ser difícil facelo doutro xeito».

Mucho más vehemente, Ana Pontón, portavoz nacional del BNG, advirtió que Feijoo cargará en su biografía con ser cómplice del veto a la tramitación del traspaso de la AP-9 en el Congreso y de la implantación «das peaxes máis altas no país dos salarios máis baixos», en tanto Luís Villares, de En Marea, puso de relieve que la política de infraestructuras en Galicia tiene un nombre, que es el «fracaso» de Feijoo.

El mandatario autonómico recriminó que «ao mesmo tempo» lo critiquen porque la Xunta no tenga el control de la AP-9 y por el incremento de sus peajes. Y acto seguido contraatacó a la oposición con dos convenio. Uno, firmado en el 2006, mediante el cual la Xunta del PSOE y el BNG financiaba el 50 % del levantamiento de los peajes de Rande y A Barcala. «Unha nacionalista a favor de pagar as peaxes do Estado», dijo escandalizado, antes de poner en valor que ahora logró que lo pague todo Fomento y de que Galicia ahorre 400 millones de euros. El otro, firmado en el 2011, a 48 horas de las generales, para financiar las obras de ampliación de Rande y Santiago subiendo todavía más los peajes, le espetó a Leiceaga, al que reprochó de acudir a la Cámara no a defender los intreses de Galicia, sino «a determinados compañeiros do seu partido», en alusión directa a Blanco.