El presidente apela a la conciencia ciudadana y a la responsabilidad e implicación inmediata de los concellos
30 nov 2017 . Actualizado a las 18:32 h.Por si quedaba alguna duda sobre la gravedad de la situación, la Xunta ha querido solemnizar el problema de la sequía con una reunión semanal del Consello en la que la preparación de medidas fueron el asunto central.
El presidente de la Xunta ha advertido que se trata de una «amenaza real» y fue más allá al advertir que la situación de emergencia, la más alta dentro del protocolo autonómico, «é máis que probable». Como adelantó en días anteriores, las zonas urbanas más pobladas del sur tienen un margen de 90 días, pero siempre que se apliquen de manera inmediata «medidas de aforro», porque de otra forma serían muchos menos.
Feijoo, que vio reforzadas sus palabras con una análisis posterior de la conselleira de Medio Ambiente, Beatriz Mato, aprovechó su comparecencia semanal para indicar las medidas que ha tomado la Administración desde que se detectaron los primeros datos anómalos -hace más de un año- y lo que va a hacer si la situación se mantiene. Pero fue expresamente duro con los concellos, a los que de una forma más o menos directa acusó de no haberse tomado en serio los avisos de prealerta y ni siquiera la alerta en la que están 7 de las 19 áreas hidrográficas de Galicia. La Xunta demanda de los alcaldes más información, y le gustaría empezar a recibir cuanto antes notificaciones de consumo (el montante de facturas) en las que se demuestre que se está reduciendo el uso del agua. A la Administración le gustaría acreditar así rebajas del caudal de entre un 10 y un 20 % por concello.
Además, el presidente y la conselleira conminaron a los concellos que no lo han hecho ya a presentar una plan de emergencia a Augas de Galicia, atender cuanto antes las posibles fugas y destinar más fondos para detectar posibles necesidades en materia de infraestructuras, de forma que se revierta la recaudación por el servicio del agua en este tipo de actuaciones. En todo caso, Mato recordó que la Xunta está dispuesta a colaborar en casos de urgencia o en casos de interés general.
Ante la previsión de que en las próximas semanas siga sin llover lo suficiente para cambiar el nivel de alerta, ambos mandatarios hicieron un llamamiento a la ciudadanía a implementar individualmente «pequenos xestos que todos coñecemos». La conselleira Mato también revisó los últimos datos hídricos, que siguen muy por debajo de la media del último lustro tras acumularse cinco estaciones anormalmente secas.
