Medio Rural prioriza el Plan Forestal como respuesta a la ola de incendios

Juan María Capeáns Garrido
Juan Capeáns SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

ALBERTO LÓPEZ

Las comunidades de montes recibirán ayudas para clarificar y ordenar propiedades

01 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La conselleira de Medio Rural se ha comprometido a darle «máis intensidade» a la revisión del nuevo Plan Forestal, el documento que va a sustituir al redactado en 1992 y que ha regido la política sobre el monte gallego sobre todo en su vertiente económica, pero también en lo relativo a la prevención y tratamiento de los incendios forestales. El departamento que dirige Ánxeles Vázquez trabaja en el nuevo texto desde el 2015, y su presentación pública estaba prevista para mediados de año. Tras la ola incendiaria, la titular de la Xunta ha anunciado su «inminente» exposición pública para que el sector pueda hacer sus aportaciones. En el Parlamento, con motivo de la presentación de los presupuestos de Medio Rural, ha solicitado la «colaboración» de todos los partidos para que su puesta en marcha se acelere al máximo.

La elaboración del plan ha generado expectación y hasta tensiones en el seno del Consello Forestal, por cuanto una de las bases del nuevo texto «racionaliza» -según adelantó en mayo el presidente Feijoo- las plantaciones de eucalipto, uno de los elementos naturales a los que se señala cuando arden los montes por cuestiones económicas y ambientales. En ese primer adelanto que esbozó el Ejecutivo también se señaló la incorporación de acciones en las áreas afectadas por los incendios, potenciando las actuaciones de restauración y la formación de las brigadas forestales desde el punto de vista de la investigación y las tareas de prevención.

El Plan Forestal, que en sí no comporta dotación económica, se acompañará este ejercicio de nuevas medidas de ordenación del monte de activación inmediata, como la puesta a disposición de los propietarios de cuatro millones de euros para impulsar instrumentos que mejoren la gestión de los terrenos, y medio millón más destinado a las comunidades de montes vecinales que podrán invertir en la clarificación de lindes.

Estas dos iniciativas absorben una pequeña parte de los doscientos millones de euros destinados al sector forestal, de los que 180 -seis más que el año pasado- se dedicarán a poner en valor, prevenir y defender los montes. En su intervención, Vázquez explicó que también hay ocho millones de euros movilizados para iniciar con carácter inmediato una serie de mejoras en los diferentes distritos en los que está dividida Galicia, como nuevos puntos de agua, cortafuegos y caminos de acceso que ayudan al mantenimiento del monte. La inversión en tecnologías relacionadas con estos terrenos tendrá una partida de 6,4 millones; la lucha contra plagas y enfermedades, 4; y las acciones silvícolas y de plantación, 24 millones.

Críticas al modelo continuista

La comparecencia de la conselleira le ha servido a la oposición de adelanto del pleno del 7 de noviembre, en el que será Feijoo el que dé cuenta de la gestión de los fuegos de mediados de octubre. El presidente escuchará con toda seguridad críticas similares a las que recibió el martes Ánxeles Vázquez, a la que han acusado de presentar unas cuentas «continuistas» que perseveran en un modelo «erróneo», como lo calificó Paula Quinteiro, diputada de En Marea. El socialista José Antonio Quiroga centró su crítica en la baja «execución parlamentaria», que vinculó con la ola de siniestros que asoló Galicia al margen de la existencia de incendiarios, «que os hai». El parlamentario del BNG Xosé Luís Rivas, Mini, puso el acento en el «monocultivo intensivo» del eucalipto, que a su entender multiplica «a ameaza do lume», y, tras vincular la situación del monte al abandono del rural, reclamó un sector «xestionado socialmente» en el que se vean reflejados todos los gallegos «menos catro pirados que prenden».

El otro gran asunto que centró la intervención de la conselleira fue el sector lácteo, en el que mantendrá su apuesta tras un 2017 que supuso su «despegue», según aseguró.

PSdeG y En Marea piden al margen del BNG una comisión de estudio

Toda la oposición quiere una comisión parlamentaria de estudio que analice lo ocurrido en la ola de incendios de mediados de octubre, aunque divergen en la estrategia. Así, En Marea y PSdeG formularon una petición conjunta para crear este órgano y el BNG defenderá una iniciativa propia en el mismo sentido, informa Europa Press. El PPdeG sostiene que «o razoable» es «escoitar primeiro» al presidente, Alberto Núñez Feijoo, y después analizar, si corresponde, otras propuestas. El presidente comparecerá la semana próxima en la Cámara gallega para abordar la ola de incendios.

Por su parte, el BNG, que había avanzado su intención de pedir esta comisión de estudio y que defenderá en el pleno una proposición no de ley para ello, manifestó su «sorpresa» por el paso dado por PSdeG y En Marea. La portavoz del BNG, Ana Pontón, se mostró molesta y sugirió que hay grupos en la Cámara que «quizás se confunden de inimigo». «Pese a que o BNG leva 15 días falando da necesidade de esta comisión, PSdeG e En Marea rexístrana sen falar con nós», criticó.

Sin embargo, tanto En Marea como PSOE apuntan a que es el BNG el que va «por libre». Y es que tanto el portavoz parlamentario del PSdeG, Xoaquín Fernández Leiceaga, como el de En Marea, Luís Villares, destacaron que fue el BNG el que previamente «rompeu o consenso» al presentar su proposición no de ley «unilateralmente» y «sen falar» con ellos.