Gonzalo Caballero: «La renovación no puede depender del reparto de sillas que algunos querían»

Domingos Sampedro
Domingos Sampedro SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

PACO RODRÍGUEZ

El líder del PSdeG le quita hierro a la falta de integración de su ejecutiva y asegura que «algunos no quisieron estar»

31 oct 2017 . Actualizado a las 17:50 h.

El pasado fin de semana, Gonzalo Caballero (Ponteareas, 1975) encadenó sin dormir las dos sesiones del congreso que lo proclamó secretario xeral del PSdeG. Durante la entrevista, sus ojos parecían cerrarse por veces mientras murmuraba palabras, aunque un refresco con gas lo reactivó lo suficiente para desgranar el cónclave y valorar la tarea que tiene por delante.

-¿Que sabor de boca le ha dejado el congreso gallego?

-Creo que fue un buen congreso, trabajamos intensamente en las ponencias y hemos abierto una etapa de renovación. Hay ganas de cambio y de fortalecer el PSdeG entre la militancia, estamos abriendo un nuevo ciclo.

-¿Era necesaria una noche entera de negociación, además con una hora añadida por el cambio horario, para conformar una ejecutiva sin integración?

-Fue una noche de trabajo intenso, en la que estuve a disposición de los compañeros para configurar los órganos de dirección. Y creo que hicimos un ejercicio de integración importante, ofreciendo la posibilidad de incorporar a compañeros de distintas sensibilidades, y avanzamos en apoyo [pasó del 58 % que obtuvo en las primarias al 71 % que logró su ejecutiva en el congreso].

-¿Ejercicio de integración? Pero si no incorporó a nadie del grupo de Villoslada en ningún órgano representativo.

-Desde las primarias hay un secretario xeral que es el de todos los socialistas gallegos y en este congreso el respaldo de los delegados ha sido mayor respecto a las primarias. Hubo propuestas para integrar compañeros y algunos no quisieron estar, así que el proyecto de renovación del PSdeG no puede depender del intercambio de sillas que algunos querían.

-Habla de personas que no quisieron estar: ¿acaso tuvo Villoslada alguna oferta?

-Le planteamos incorporarse al comité federal, pero cuando hablaron de cupos me atuve a lo que dije en las primarias, dejando claro que el intercambio de sillas era un estilo de la vieja política que no fortalecía al PSdeG y que la militancia demandaba un proyecto de cambio y que mi compromiso es con la militancia y con el cambio.

-¿Teme que esa falta de integración sea un germen para la inestabilidad en el partido?

-No, en absoluto, porque fue un congreso de mucho apoyo, superior al 70 %, y que permitió el reencuentro con los expresidentes Laxe y Touriño. No tengo ningún temor. Es verdad que siempre puede haber alguien descontento porque no logró lo que se proponía, pero eso no tiene ya trascendencia en la nueva hoja de ruta del PSdeG. La ciudadanía gallega está percibiendo que hay un reinicio, creo que eso es nítido.

-Lo que se percibió fue un guiño a Vigo, con la elección de Carmela Silva para el comité federal. ¿De quien partió la propuesta?

-A ver, la ejecutiva la conforma el secretario xeral y los órganos nacionales y federales suelen reflejar la pluralidad del partido. Dentro de ese esquema, fueron promovidos compañeros con diferentes planteamientos, como la presidenta de la Diputación de Pontevedra.

-Ya, pero ¿quién propuso su nombre, usted?

-No, el secretario xeral del partido en Vigo nos planteó esa opción, y la aceptamos en aras de la integración.

-¿Qué tipo de relación se propone tener con quienes ostentan la mayoría en la agrupación de Vigo, con los que siempre fue muy crítico?

-La alcaldía de Vigo ha obtenido un resultado muy importante en las municipales, es una alcaldía de referencia en el país que cuenta con el apoyo y respeto de los socialistas gallegos. Y en paralelo, es la primera vez que alguien de Vigo ocupa la secretaría xeral del PSdeG-PSOE, y espero que entre todos seamos capaces de construir un proyecto que genere alternativa al Partido Popular en Galicia. A partir de ahí, espero que la relación sea fluida y que estemos todos a la altura de las circunstancias.

-¿Echó en falta alguna llamada de felicitación estos días?

-He tenido muchas, creo incluso que demasiadas.

-El alcalde de Vigo, su tío, le ha deseado mucha suerte en su nueva responsabilidad: ¿se lo transmitió en persona o solo a través de la prensa?

-Con anterioridad ya me había felicitado por mi elección como secretario xeral en las primarias. Y hablamos también el viernes pasado: me deseó buen congreso y que acertara en la composición de una nueva dirección para el PSdeG.

«La alcaldía de Vigo es una referencia para el país, espero que la relación sea fluida»

-¿Cuáles serán sus primeras decisiones al frente del partido, ahora que ha asumido el mando?

-Acabamos de salir todavía del congreso, ha pasado muy poco tiempo, pero puedo asegurarle que las primeras decisiones van a ser en clave interna, porque llevamos demasiado tiempo sin dirección y estamos obligados a fortalecer la estructura del PSdeG. Y a partir de ahí también vamos a estrechar nuestras relaciones con las agrupaciones locales.

«Mi empeño estará en trabajar para que Feijoo deje de gobernar cuando haya elecciones»

«Mi labor política va a ser compatible con mi trabajo en la universidad»

Gonzalo Caballero asegura que tiene previsión de seguir en activo como docente.

-¿Cuál va ser su modelo, profesor de Economía por la mañana y secretario xeral por la tarde?

-A fecha de hoy mi intención es mantener mi compromiso académico, y que mi labor política sea compatible con mi trabajo en la Universidade de Vigo. Creo que es positivo que los actores políticos mantengan una actividad profesional propia que les permita estar en contacto con la vida real, aunque si la agenda lo determina, tampoco me cierro a analizar algún cambio.

-Superado el congreso gallego, ahora vienen los provinciales. ¿Tiene alguna propuesta de partido, algún candidato favorito?

-[Resopla]. Bastante he tenido estos días. Mi agenda está en clave gallega, y siempre respetaré la voluntad de la militancia. El secretario xeral del PSdeG lo es de todos los socialistas y trabajará siempre en favor del partido y de nuestro proyecto.

-En la clausura del congreso del PSdeG, Pedro Sánchez aportó la ración de crítica al PP, pese a entenderse en el caso de Cataluña. ¿Cabe algún tipo de colaboración con el PP de Feijoo?

-Nosotros somos la alternativa política, hemos gobernado y sabemos gobernar, entendemos bastante de eso que llaman las cuestiones de Estado, pero, sabiendo que somos la izquierda, nuestra posición ha de pasar por generar propuestas que favorezcan la alternativa. Ahí estará mi empeño, en trabajar para que Feijoo deje de gobernar Galicia cuando se convoquen elecciones.

-¿Nada de diálogo, entonces?

-Diálogo, sí, pero nuestro planteamiento es el de mantener un diálogo con el conjunto de las fuerzas de izquierda con el fin de recuperar músculo político y generar una alternativa.

-¿Cómo valora la posición de Podemos y En Marea respecto a la crisis catalana?

-Los socialistas no somos independentistas ni nacionalistas ni queremos trocear la soberanía nacional. Apostamos por la ley y el Estado de derecho, por tender puentes de diálogo que permitan que la política aporte soluciones, pero discrepamos de quienes se desvían de la democracia y no entienden que la soberanía nacional pertenece a toda la ciudadanía de España.

-¿Pero esa discrepancia impide llegar a pactos de gobierno?

-El PSdeG tiene su propio proyecto, frente al PP, un proyecto de cambio, pero entendemos que a veces hay que coincidir con otros planteamientos para favorecer el cambio y la alternancia.

Abel Caballero desea mucha suerte «especialmente al secretario xeral»

El alcalde de Vigo, Abel Caballero, deseó ayer «mucha suerte» a la nueva dirección del PSdeG y en especial a su sobrino, Gonzalo Caballero, proclamado secretario xeral en el decimotercer congreso, celebrado el pasado fin de semana en Santiago. Caballero expresó en rueda de prensa su deseo de «mucha suerte» a la nuevos responsables del PSdeG y en especial a su líder «por razones que a nadie se le escapan». Preguntado por su ausencia en el cónclave de los socialistas gallegos, Abel Caballero insistió en el argumento de que para él «en la política, lo primero es la ciudad de Vigo, lo segundo, la ciudad de Vigo, y lo tercero, la ciudad de Vigo. Y después viene el Partido Socialista». Pero no dio ninguna explicación sobre los motivos que lo llevaron a no acudir a la cita orgánica.