El huracán «Ophelia», convertido ya en borrasca, dejará hoy olas que podrían superar los cinco metros
16 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Una de las consecuencias más notables del paso de Ophelia, el huracán de categoría tres convertido en borrasca se percibirá hoy en el mar. Las olas podrían superar los cinco metros. Esta es una buena ocasión para explicar algunos conceptos que estamos habituados a escuchar en las previsiones; mar de viento, de fondo y combinada.
Ophelia es un potente ciclón que está situado en el Atlántico. «La depresión pasará a unos quinientos kilómetros de la costa gallega en su máxima aproximación», indica Francisco Infante, delegado de la AEMET en Galicia. Está lo suficientemente lejos como para evitar el impacto directo pero no para que pase completamente desapercibido.
Los vientos intensos que produce el sistema de bajas presiones provocan una erosión de la superficie oceánica. Ese mar revuelto que genera la borrasca en el océano es lo que llamamos mar de viento. «La acción de esta clase de fenómenos también crean un efecto de marea ciclónica, produciendo una elevación del nivel del mar que se suma a ese mar de viento», añade. Estas situaciones suponen un riesgo importante para cualquier embarcación. Al mismo tiempo, el oleaje caótico que genera el viento comienza a desplazarse de una manera más organizada hasta que se encuentran con algún obstáculo, como nuestras costas, generando lo que se conoce como mar de fondo. «Es un oleaje que se ha producido lejos y que se propaga hasta otro lugar», dice Infante.
Existe un experimento mental que ayuda a entender estos conceptos. Imagínese que tiene un secador y una bañera llena de agua. Si activa el aparato y dirige el aire que sale con potencia hacia el agua conseguirá agitarla, creando un mar revuelto. Su secador sería la borrasca y estaría generando mar de viento. El agua erosionada también se desplazaría hacia el final de la bañera como mar de fondo.
Además, cuando la dirección del viento y del oleaje coinciden se produce una mar combinada, que favorece que las olas lleguen con más fuerza, al contar con ese impulso adicional. Una situación que producirá Ophelia. «La mar combinada será del suroeste y la altura del oleaje estará entre los cuatro y los seis metros», concluye el científico.
