Las organizaciones de transporte gallegas consideran el peaje vasco un «castigo a la periferia»

Las principales organizaciones de transportistas de Galicia consideran un duro golpe para sus economías la imposición de tres peajes en la carretera nacional I a su paso por Guipúzcoa a partir de enero. Los diez euros que se sumarán a los costes de sus portes hacia Francia y el resto de Europa son estimados como «un castigo a la periferia, que hará más difícil vender fuera productos gallegos de escaso margen como la leche, frutas o agua», advierte Ramón Alonso, presidente de la Federación Gallega de Transporte de Mercancías (Fegatramer). El visto bueno de la UE a la implantación de peajes en el vial que conduce a la frontera francesa en Irún es para Alonso «la aprobación de un arancel más que se suma a los mil kilómetros que tienen que hacer los productos gallegos para llegar a Europa». Añade el presidente de Fegatramer que el litro de combustible es en Irún 15 céntimos más barato que en Galicia «pese a que hay refinería en A Coruña», dice para criticar que la Xunta mantenga los 0,360 euros por litro del impuesto sanitario. «Los peajes que están surgiendo son una consecuencia del trabajo de los grupos de presión de las grandes constructoras», concluye para lamentar que «se está quemando al sector del transporte».

Alberto Vila, gerente de la Asociación Empresarial de Mercadorías por Estrada de Galicia (Apetamcor), advierte que la N-I era hasta ahora la opción menos costosa para los transportistas gallegos en sus viajes a Europa, estimando como «rentabilísimo económicamente» para la Diputación de Guipúzcoa la implantación de los peajes, que sin embargo tendrá un coste menor para los camioneros locales en sus viajes internos, además de contar con la promesa de la institución foral de compensarles con ayudas para la renovación de la flota y la creación de un centro para el transporte. «No hay otra alternativa, tenemos que pasar por allí sí o sí, es un paso estratégico», subraya Vila, al tiempo que relaciona que el visto bueno de la UE con los apoyos dados por el PNV al PP en el Congreso en la presente legislatura.

De «competencia desleal» califica el presidente de la Federación Empresarial de Transportes de Mercancías (Fetram), Antonio Señarís, la imposición de un peaje que estima ha sido ideado solo para recaudar entre los camioneros foráneos, postura compartida ayer por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, informa Juan Capeáns. «Non pode ser que en España haxa dous tipos de persoas, que unhas paguen menos e outras máis». El presidente gallego anunció que la Xunta estudiará el desequilibrio que pueden causar los peajes de la N-I y que, en última instancia, queda el recurso judicial.

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