La aprobación de la investigación del Alvia liquida un tabú que duró 33 años

Pablo González
pablo gonzález REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

El Congreso solo investigó accidentes de transporte en una comisión creada en 1984

29 sep 2017 . Actualizado a las 06:52 h.

Ni el Prestige, ni las tragedias aéreas de Spanair o el Yak-42, ni los accidentes ferroviarios de Chinchilla y Torralba... Ninguno de estos sucesos en la esfera del transporte mereció una investigación parlamentaria en el Congreso (en el Parlamento gallego sí hubo una muy diluida del Prestige), a pesar de que en muchos casos se solicitaron insistentemente. La aprobación ayer de la comisión de investigación del Alvia rompe un tabú político que duró 33 años, desde que en 1984 se inició la investigación de los dos accidentes aéreos ocurridos en el aeropuerto de Barajas en noviembre y diciembre de 1983 que causaron 274 muertos.

La comisión aprobada ayer es la 18.ª de las que se han creado en el Congreso, y en esta legislatura, convertida ya en la que más investigaciones parlamentarias ha aprobado, coincidirá con otras tres: las pesquisas sobre la presunta financiación ilegal del PP, la que analiza el eventual uso partidista del Ministerio del Interior y otra más sobre la crisis financiera.

El júbilo de las víctimas del Alvia retumbó en el hemiciclo al conocerse el resultado de la votación, una alegría que contrastó con los gritos de frustración que se escucharon en este mismo Parlamento en el último pleno de la legislatura pasada, cuando se rechazó una petición similar con los votos del PP y el PSOE. Esta vez los dos principales partidos no fueron de la mano y los socialistas confirmaron el apoyo a la comisión que venían anunciando desde que Pedro Sánchez retornó a la secretaría general. Finalmente, la investigación parlamentaria, que durará un mínimo de cinco meses, contó con 208 votos a favor y 135 en contra. El PP se quedó técnicamente solo en su rechazo a la propuesta de PSOE y Unidos Podemos-En Marea, que pactaron una propuesta conjunta de mínimos. Solo sus aliados naturales de Unión del Pueblo Navarro y Foro Asturias los acompañaron en el voto negativo.

El PSOE pide perdón

Pilar Cancela fue la encargada de defender el cambio de postura del Grupo Socialista y pidió perdón a las víctimas por no haber apoyado antes la comisión de investigación. «Sentimos el retraso, pero caminaremos juntos», dijo, mirando hacia el palco de invitados donde estaba una representación de la plataforma de víctimas. La responsable de la gestora del PSdeG admitió que en un principio cuestionaron la investigación parlamentaria porque no veían necesario «duplicar actuaciones» al estar abierto un procedimiento judicial, «más proactivo a la hora de recabar pruebas» para esclarecer el accidente, que causó 80 muertos y 144 heridos el 24 de julio del 2013. No obstante, el giro político del PSOE, alegó, descansa sobre dos novedades relevantes en el caso: el auto de la Audiencia de A Coruña que ordenó investigar si se había realizado una evaluación integral de riesgos en la línea de alta velocidad Santiago-Ourense, evitando que se cerrara la instrucción. Y, por otro lado, el dictamen de la Agencia Ferroviaria Europea sobre la falta de independencia del informe de la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios (CIAF). Pilar Cancela admitió que el mérito en el cambio de postura del PSOE se debe «al tesón y la lucha de las víctimas».

Alexandra Fernández, de En Marea, fue muy dura con la bancada popular, a la que acusó de «seguir mirando hacia otro lado para que pase el tiempo y las víctimas terminen agotándose». Recordó el dictamen de Bruselas sobre la falta de independencia de la investigación de la CIAF, y que la Comisión Europea ve necesario reabrirla. En cambio, denunció que el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, «echó balones fuera» asegurando que no podía ordenar la reapertura de la investigación a la CIAF al ser un organismo independiente, al tiempo que se impulsaba el nombramiento del actual presidente del organismo, Fernando Montes, que había participado en el «infame» informe. La diputada gallega definió este contexto como «una trama de Fomento en contra de la verdad». «Deberían investigarles a ustedes [dijo mirando a los diputados del PP] para ver por qué tratan de ocultar la verdad».

Fernando Navarro, de Ciudadanos, enfocó la investigación como una forma «de aprender de los errores» y no como «una herramienta de lucha partidista en busca de linchamientos». En este sentido, llamó a investigar si hubo prisas en la inauguración de la línea y si las decisiones políticas distorsionaron el enfoque técnico.

Celso Delgado, diputado ourensano del PP que preside la comisión de Fomento, se reafirmó en el rechazo de su grupo a la investigación, al considerar que el procedimiento judicial tiene «todas las garantías» de independencia, «sin el sesgo partidista» y «sin interferencias externas». Recriminó al PSOE su cambio de posición -«no nos convencen sus argumentos», dijo- y se abrió a reconsiderar la postura del PP dependiendo de la dirección que tome la sentencia judicial. «Queremos saber la verdad, no tenemos nada que ocultar y sentimos con dolor lo que pasó en Angrois», concluyó.

 

Feijoo está dispuesto a comparecer y el BNG pedirá otra comisión en O Hórreo

Mientras las víctimas celebraban en el Congreso un día «histórico» para sus reivindicaciones, el presidente de la Xunta respondía a los periodistas sobre la creación de la comisión de investigación. Feijoo aseguró que, «dado que no Congreso hai maioría para abrir unha comisión de investigación, estamos a disposición de que, se me chaman, dar a nosa opinión no momento no que o Congreso o considere oportuno», según informa Juan Capeáns.

El presidente gallego atribuyó la puesta en marcha de la investigación a que el PSOE «cambiou de opinión como consecuencia do seu novo liderado, e o PP mantivo a súa opinión». «Non é unha crítica -aclaró-, é unha crónica do que ocorre». Feijoo se mostró partidario de abrir el foro político parlamentario una vez conocidas las conclusiones de la sentencia.

Por otra parte, el BNG, formación pionera en la reclamación de la comisión tanto en el Congreso como en el Parlamento gallego, anunció ayer que, con motivo del debate del estado de la autonomía que tendrá lugar la semana que viene, presentará una iniciativa para la creación en el Parlamento de Galicia de una comisión paralela a la del Congreso, donde la formación nacionalista no tiene representación.

En el mismo texto, la organización nacionalista califica de «positivo» que el Congreso diera luz verde a la investigación, pero considera una «vergoña democrática» que el veto del PPdeG y el PSdeG permita hacer lo mismo en Galicia. El Bloque recuerda el papel «decisivo» que tuvo, a través de Ana Miranda, en el dictamen de las instituciones europeas sobre la falta de independencia de la investigación oficial.

No dejaron entrar en el pleno a la directiva de la plataforma

El presidente de la plataforma de víctimas del Alvia, Jesús Domínguez, el vicepresidente, Rogelio Bernardo Brotón, y una vocal, Teresa Gómez-Limón, no pudieron acceder ayer al pleno del Congreso en el que se aprobó la comisión de investigación. Aunque no les dieron explicaciones, creen que se debe a que están vetados tras protestar en el pleno de la pasada legislatura por el rechazo a la apertura de las pesquisas. «Estamos fichados», bromearon.