A la espera de un nuevo modelo tras dos años gratis

Xosé Carreira LUGO / LA VOZ

GALICIA

ALBERTO LÓPEZ

El acuerdo del año 2015 para un sistema rotatorio sin pagar aún no se ejecutó

16 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El 31 de julio del 2015, Lara Méndez, la alcaldesa de Lugo, daba una noticia inesperada para muchos conductores: se acabó la ORA. El acontecimiento llegaba en un momento en el que la empresa adjudicataria, una filial del grupo Vendex, había alcanzado unos índices de popularidad terribles. Los empleados parece que tenían desde hacía algún tiempo la consigna clara de hacer caja como fuera. Así, se dieron situaciones de que a quien pillaron sobrepasado cinco minutos la hora marcada en el tique le cayó una sanción.

El equipo de Lara Méndez tuvo los suficientes reflejos como para sacarle rendimiento social a una sentencia judicial que anulaba el contrato suscrito años antes por la empresa Doal. Muchos de los usuarios de la zona azul creyeron que su eliminación sería una auténtica panacea y lo que realmente ocurrió es que aparcar en el centro se convirtió en un auténtico caos. Quienes estaban acostumbrados a llegar, aparcar y resolver cualquier tipo de gestión en el centro por menos de 50 céntimos se encontraron dando vueltas durante un cuarto de hora, como mínimo, para buscar un sitio libre. Vista esa situación, ciudadanos y oposición empezaron a reclamar aparcamientos disuasorios en zonas próximas al centro. El gobierno municipal llegó a plantear más de media docena de sitios pero, de momento, no pudo hacer nada por estar atado de pies y manos al no tener aprobado el presupuesto de este año.

Hace dos años, la alcaldesa anunció que la supresión de la ORA sería por un plazo de ocho meses. Decía también que se creaba una comisión de trabajo para redactar una nueva regulación de la zona azul en la ciudad. Nada de eso llegó a ocurrir dos años después.

Lo que sí se produjo fue un acuerdo plenario unánime de propuesta de un sistema gratuito de aparcamiento de forma rotatoria. Eso fue en octubre del 2015 y, por ahora, nada se sabe de ese modelo que funciona en otras ciudades. El PP plantea comprar un vehículo que vigile los coches que se pasen del tiempo máximo de aparcamiento permitido para que posteriormente, sus dueños paguen sanción.

El último acuerdo es de 12 de mayo de este año; fue el de crear una comisión de control y seguimiento. De momento no se convocó.

A mayores, los trabajadores de la ORA, luchan judicialmente para que la empresa les conserve sus puestos.