Fabiola García: «Queremos acercar servicios móviles a los mayores que viven en zonas rurales»

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

SANDRA ALONSO

Según la directora xeral de maiores, el reto del envejecimiento en Galicia es permitir que las personas sigan viviendo en su entorno habitual

14 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Está al frente de la Dirección Xeral de Maiores e Persoas con Discapacidade. Es decir, Fabiola García (Ribeira, 1985) asume un departamento con una población diana de 661.000 gallegos, sumando solo a los mayores de 65 años. Pero es que las previsiones son de un ascenso imparable, por lo que la comunidad debe prepararse para atender a una población cada vez más envejecida.

-¿Cuál es el objetivo a lograr al abordar el envejecimiento?

-Desde la Xunta intentamos que los mayores continúen en sus casas, por lo que estamos tratando de prestar servicios de proximidad. Hace unos días, el Consello de la Xunta aprobaba 1,2 millones de horas más para el servicio de ayuda en el hogar. Galicia es la comunidad que más utiliza esta prestación, que supone el 30,3 % del total. Es además un servicio muy valorado, y el 91,6 % de los que lo reciben consideran que es el más adecuado para poder seguir en sus casas.

-Primar entonces estos servicios frente a los residenciales.

-Facilitar que la persona pueda volver a casa, por ejemplo, con un servicio de teleasistencia. En este momento tenemos 5.200 usuarios pero ya estamos trabajando para aumentar esa cifra.

-El número de personas mayores va a seguir creciendo, ¿cómo hacerle frente para evitar la dependencia y el aumento del gasto social?

-En la consellería trabajamos con las previsiones de cara al 2020, y en tres años pasaremos de unos 66.000 dependientes a 73.000. Hacer una estimación a veinte años es poco más que una quimera, porque que la evolución demográfica implique que va a haber un mayor número de personas mayores con una prevalencia a ser dependientes, no quiere decir que vayan a serlo. Una política sociosanitaria, la vida activa y el envejecimiento activo pueden mitigar este crecimiento. De todas formas, para todas estas personas que pueden llegar a ser dependientes queremos primar servicios de proximidad, teleasistencia, ayuda en el hogar o libranzas. Tenemos dos proyectos europeos muy importantes, el Red May y el Nutriage. Con el primero queremos acercar distintos servicios móviles a las personas mayores de 55 años que viven en el rural, como unidades móviles de servicios sociales, de alzhéimer, que el mayor se sienta seguro de estar en su casa porque sabrá que a golpe de teléfono o pulsador habrá una persona que le va a atender. En cuanto al Nutriage, pretende asegurar un envejecimiento saludable a esta población a través del estudio, diseño y evaluación de nuevas estrategias de nutrición.

-Se está enfocando a los mayores por el gasto que suponen pero, ¿qué aportan?

-Desde luego los mayores enriquecen la sociedad y en ningún caso suponen gasto, pero hay que seguir fomentando los hábitos de vida saludable no solo para llegar a esa edad, sino para que las personas de mediana edad empiecen a trabajar para no convertirse en dependientes y valerse en un futuro por sí mismos.

-¿Galicia necesita que se tenga en cuenta este envejecimiento, además de la dispersión, en la financiación?

-Efectivamente, Galicia tiene unas características de dispersión demográfica que no se dan en otras comunidades. No nos podemos comparar con Madrid, porque aquí el coste de los servicios es mucho mayor. Es muy diferente llevar un servicio a la montaña lucense que desplazarse unos kilómetros. Hay una comisión de análisis del sistema de dependencia y ahora se están elaborando distintos documentos y ya nos han llegado distintas propuestas en las que espero que Galicia tenga su parte. La comunidad necesita que se tengan en cuenta estos criterios de dispersión y envejecimiento que no tienen otras comunidades.