Todas las claves de la preparación de un litigio judicial

J.M.P.

GALICIA

Los letrados de la Administración de Justicia o secretarios judiciales son los que acuerdan la fecha del juicio y examinan todas las cuestiones de organización desde su puesto de directores de la oficina judicial

17 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Depende en gran medida de las circunstancias de cada juzgado, pero el Consejo General del Poder Judicial aconseja que los juicios se preparen con al menos cuatro meses de antelación «para evitar suspensiones innecesarias y tener tiempo suficiente para solucionar cualquier problema sobrevenido», explica Victoria Moyano. Cita entre esos imprevistos los de acusados o testigos en paradero desconocido o las renuncias de abogados y procuradores, aunque no siempre es posible solucionar esos problemas y entonces se procede a la suspensión del juicio. 

La preparación del juicio

En la preparación del juicio interviene en primer lugar el juez, que es quien decide sobre la admisión de pruebas propuestas por la fiscalía y los abogados de la acusación y la defensa. El juez, además, es quien preside el juicio, la máxima autoridad. Los letrados de la Administración de Justicia o secretarios judiciales son los que acuerdan la fecha del juicio y examinan todas las cuestiones de organización desde su puesto de directores de la oficina judicial. Otro protagonista en la preparación del juicio es el funcionario del cuerpo de tramitación, que se encarga de la preparación administrativa del procedimiento. Bajo las instrucciones del secretario judicial, se ocupa de hacer las gestiones necesarias para tener disponibles todas las pruebas admitidas, expedir las citaciones necesarias a acusados, peritos y testigos y realizar las gestiones para que un acusado preso sea trasladado desde el centro penitenciario al juzgado. También revisa el correo relativo al juicio y los escritos presentados por los abogados y los procuradores y debe dar cuenta al juez o al letrado de la Administración de Justicia de cualquier incidencia relacionada, por ejemplo, con las declaraciones por videoconferencia o detrás de una mampara.

El funcionario de auxilio judicial tiene encomendada la realización de las citaciones de los acusados, testigos y peritos que deban hacerse personalmente en la oficina judicial. El modo normal de llevar a cabo estas citaciones es por correo ordinario con acuse de recibo, mediante un exhorto dirigido a otros juzgados o incluso mediante el uso del correo electrónico.

El funcionario del cuerpo de auxilio judicial también tiene a su cargo la grabación del juicio y el llamamiento de las personas que deban entrar a la sala de vistas.