De ellos 9.000 cayeron en una única jornada, la más activa desde que se tienen registros, que fue el día 26
07 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Las lluvias y tormentas del mes de mayo dejaron en Galicia la friolera de 23.000 rayos, de los que 9.000 cayeron en una única jornada, la más activa desde que se tienen registros, que fue el día 26. Además del aparato eléctrico, los frentes dejaron una media de 126 litros por metro cuadrado y eso es más agua de lo habitual. Sin embargo, los días en que llovió fueron menos de los esperados. La humedad del mes, incuestionable, no impidió que fuese una temporada cálida, «extremadamente» tal y como la definió ayer MeteoGalicia en su balance mensual. Hay que recordar que el día 24 se alcanzaron los 35 grados en algunos puntos de la comunidad.
El interior de Galicia se llevó la mayor parte de esta actividad atmosférica. Por ejemplo, de los 9.000 rayos que cayeron el día 26, la práctica totalidad (8.716) lo hicieron en la mitad este de Galicia, la provincia de Lugo y parte de la de Ourense. Precisamente, en la capital de esta última provincia se llegó al techo de calor del mayo gallego (en los registros históricos de este mes): los 35 grados. Y en la montaña ourensana también hubo otro récord, ya que en la zona de Manzaneda las mínimas se situaron en 10 grados, mientras en Viana y Valdeorras el termómetro marcó algunas noches los 6 grados.
Las Rías Baixas tuvieron en cambio las mínimas más altas, con 14 grados.