Las alianzas entre aerolíneas cambian los vuelos de largo radio
Air Europa no vuela entre Santiago y Madrid. O mejor dicho, no lo hacía hasta esta semana, aunque sus aviones sigan sin enlazar dichos destinos. Ryanair lo hará por la compañía de Juan José Hidalgo para todos aquellos pasajeros que enlacen en Barajas en el nudo de Air Europa de largo radio hacia los destinos más demandados de América. La alianza cuajada esta semana es la evidencia de que el sector del bajo coste europeo tiene sus miras fuera del continente. Lo hace bien mediante acuerdos de abastecimiento de usuarios a las rutas de larga distancia de otras compañías -como el caso de Ryanair con Air Europa en Madrid, o los que negocia con TAP en Lisboa y Oporto y con Norwegian en Barcelona- o bien volando directamente, como la citada compañía escandinava. Norwegian operó su primer vuelo en España en el 2003 y hoy ofrece ya desde 14 terminales españolas 163 rutas: diez nacionales, 153 europeas, cuatro a Estados Unidos, una a Israel y otra a Marruecos.
Tras ganar presencia en el mercado -Ryanair es líder en España con 12 millones de los 66 millones de pasajeros que volaron en el primer cuatrimestre-, las low cost tratan de mejorar su imagen dando mayores facilidades que en el pasado para el embarque con equipaje, ofrecer una conectividad hasta ahora inexistente en viajes con escala propia o mediante alianzas con terceros, y abrirse en definitiva a una cuota de mercado remisa a utilizar sus asientos, como lo son aún buena parte de los viajeros de negocios.
La posición de Galicia ante dichos cambios está, en casos como el de Santiago, bien situada y por encima de la media estatal y del resto de los aeropuertos del noroeste peninsular español. El sector del bajo coste en España absorbe el 52,8 % de las plazas vendidas en los cuatro primeros meses del 2017, frente al 85,6 % de Santiago. En Asturias las cuatro compañías low cost que operan en su pista captan el 56,4 %. En Bilbao, donde la oferta de vuelos baratos es defendida por nueve marcas, se queda en el 47,6 % del total, llega a un 69,7 % en Santander, al 50,7 % en Vitoria y a un 32,2 % en San Sebastián.