Una intervención de Beiras tensa la Asamblea de Anova que acaba con un rifirrafe

López Penide / EFE PONTEVEDRA / LA VOZ

GALICIA

Un grupo de jóvenes relacionados con Frente Popular Galega (FPG) protagonizaron una discusión después de que un militante de O Morrazo interrumpiese al histórico político nacionalista

18 mar 2017 . Actualizado a las 21:43 h.

La III Asamblea de Anova, a la que solo se ha presentado una lista para renovar la dirección, ha vivido un tenso momento durante una intervención en la que el histórico político Xosé Manuel Beiras defendía su trayectoria nacionalista pero, al mismo tiempo, un aperturismo de la formación, lo que generó críticas de un sector del público, discusión que terminó derivando en un rifirrafe.

Beiras, pidió la palabra en el debate de una enmienda sobre la tesis política de la formación, y se manifestó a favor de la unidad popular por parte de Anova, que debe impulsar a En Marea, eliminando las «fronteras» entre los diferentes agentes que conforman la confluencia en Galicia.

Ello generó en una crítica de un militante de O Morrazo que vociferó llevando la contraria a Beiras, lo que provocó que el actual secretario de organización, Rafael Dopico, le pidiese «respeto», ante lo que un grupo de jóvenes relacionados con Xeira, afines al Frente Popular Galega (FPG) comenzasen una discusión, y que no firman ninguna de las enmiendas presentadas a la oficial.

Esta asociación juvenil se afilió de forma reciente a Anova y no forma parte de las bases activas de la formación nacionalista.

La discusión desembocó en una pelea, con empujones, golpes y patadas, según recoge EFE, al tiempo que añaden que, entre un gran grupo de personas, gente del entorno del sector oficial intentó separar, entre ellos el alcalde de Santiago, Martiño Noriega, que intentó calmar los ánimos. En el seno de la formación, por el contrario, minimizan el incidente. «Funlle dicir que deixara de berrar, que non podía interromper a un compañeiro que estivera falando e a partir de aí houbo un intercambio de opinións un pouco exaltado, pero non tivo que intervir o 061, nin a Garda Civil. Eu estaba metido no medio e so houbo algún empurrón que outro, pero nada grave», remarcó Rafael Dopico. 

En el momento del enfrentamiento, Beiras estaba pidiendo la unidad entre los que se consideran de izquierda, solidaridad y generosidad, porque «solo faltaría que se reprodujese dentro de En Marea» el problema del nacionalismo, marcando diferencias entre los que se consideran soberanistas y los que no.

De hacer esas diferencias, «¿para que carallo sirvió el salto de frontera que hicimos en 2012?» cuando Anova se escindió del Bloque tras la asamblea de Amio. «Si hay alguien que tiene trayectoria en el proyecto de nacionalismo es mi persona», ha destacado el líder de Anova que recuerda que fue esta formación la que lanzó la propuesta de que había que «pasar la frontera» para «romper el tabú» y luchar contra las fueras que atacan a las clases más agredidas.

Tras el tenso momento vivido en la Asamblea, Beiras se bajó del escenario y abandonó la sala, entre un sonoro aplauso.

La III Asamblea de Anova se celebra con una única lista para renovar su dirección, si bien no ha conseguido aglutinar a las diferentes sensibilidades del partido pese a que la lidera Antón Sánchez, diputado de En Marea y actual coordinador de la formación, que sí es un nombre ampliamente respaldado para ser elegido portavoz, el próximo día 1 de abril.

A pesar de los esfuerzos realizados por la candidatura oficial, que encabeza Sánchez, e impulsados por el histórico político y líder de Anova, Xosé Manuel Beiras, no ha sido posible aglutinar en dicha lista las sensibilidades encontradas en la formación, que divergen, sobre todo, en cómo encarar las alianzas con otras fuerzas en el camino de la unidad popular.