La oposición ve a un futuro presidente alejado de la realidad con el «síndrome de Monte Pío»

GALICIA

XOÁN A. SOLER

Villares, Leiceaga y Pontón calificaron el discurso de investidura de Feijoo como «decepcionante» y «continuista»

09 nov 2016 . Actualizado a las 00:45 h.

Luís Villares (En Marea): «Un erro de diagnose que oculta unha mala xestión»

Para el portavoz de En Marea, el discurso del candidato a la presidencia de la Xunta fue un discurso fallido porque partía «dunha mala diagnose» que, a entender de Luís Villares, solo puede dar lugar «a un mal Goberno». El representante del partido instrumental asegura que el primer error fue asegurar que se está saliendo de la crisis «ignorando a situación social, laboral e económica do conxunto da sociedade». Y entiende Villares que, si se cumple el plan laboral del PP, la situación volverá a ser la del 2009, porque entonces había 100.000 empleos más que ahora; es decir, los que promete Núñez Feijoo: «Tres lexislaturas completas para volver ao punto de partida».

Villares escuchó un discurso «esgotado» sin medidas concretas para los ciudadanos que atraviesan una situación difícil, y aseguró que el «devalo demográfico» que protagonizó buena parte del relato del candidato era un síntoma de esa situación social, de la emigración de los jóvenes o de las dificultades para tener hijos, problemas de los que «non se avalían as causas».

También criticó el portavoz de En Marea la petición que Feijoo hizo de una legislatura de consenso y civismo. «Evidentemente, respectamos a maioría do PP, pero non nos conformamos». Echó en falta Villares una reflexión sobre la vivienda, el empleo, la jubilación, los derechos colectivos o la deuda, que aseguró que había crecido un 250 %. Por lo tanto, «un erro de diagnose que pretende ocultar unha mala xestión».

Xoaquín Fernández Leiceaga (PSdeG): «A palabra que me vén á cabeza é decepción»

«Decepción». Esa fue la primera idea que se le vino a la cabeza al portavoz socialista tras escuchar el discurso de Feijoo, porque a su entender no fue más que «un rosario de boas intencións que non teñen propostas detrás». Por eso para Leiceaga más importante que las «presenzas» fueron las «ausencias». Es decir, lo que la bancada socialista cree que se debía haber dicho y no se dijo: atención primaria, dependencia, pensiones, lengua, transparencia... «O único que promete é continuar as políticas existentes sen facer crítica e, polo tanto, condenadas a repetir os mesmos fracasos». Como ejemplo puso la crisis demográfica. Fernández Leiceaga se refirió a un plan aprobado anteriormente por el Parlamento «que non tivo ningunha incidencia real». «¿Que nos propón? ¿Repetir ese xesto baldeiro?».

El portavoz socialista quiso advertir también sobre lo que él entendió como una injerencia en la labor de la oposición. «Pretende que o Parlamento estea acabado baixo o principio de compartir cousas e quere facernos renunciar a que fagamos o labor de oposición», dijo. Con todo, avanzó que en una cuestión sí iban a «tender unha man», y es en la financiación autonómica, «que [Feijoo] despacha con tres obviedades que non teñen contido porque non quere comprometerse fronte ao Goberno de Rajoy».

Como los demás portavoces, Leiceaga criticó que no se abordase la violencia contra las mujeres, cuando el año pasado, en proporción a la población, Galicia fue la comunidad que registró más casos mortales. Fue «un discurso sen ambición» que el PSOE piensa contrarrestar con una oposición «crítica pero tamén construtiva».

Ana Pontón (BNG): «Unha crítica ao nacionalismo e unha renuncia á defensa do país»

Para Ana Pontón, Núñez Feijoo padece «síndrome agudo de Monte Pío», que para la portavoz nacionalista se traduce en un discurso «afastado da realidade do país, autocompracente e inmobilista». Entiende además el BNG que Núñez Feijoo está obsesionado «con defender o actual réxime, o actual statu quo, criticando o nacionalismo e renunciando a calquera opción de defensa dos intereses deste país».

Ana Pontón sintió además un déjà vu porque a su entender estas son las mismas promesas que las de hace cuatro y ocho años, «e o máis grave é que está a debuxar un futuro no que nada pode cambiar». Y en relación a las referencias que Feijoo hizo sobre lo que une a todos los gallegos, la portavoz del Bloque recordó que si había un nexo de unión era la lengua, y lamentó que el candidato a la presidencia de la Xunta no tuviese intención de enterrar el hacha de guerra «e pór en marcha un grande acordo de país para que a lingua avance». También lamentó las escasas referencias a la violencia machista, «algo polo que non pode pasar de puntillas».  

Pedro Puy (PPdeG): «Unha política para que Galicia avance e un convite ao diálogo»

Solo el portavoz del PP defendió el discurso del candidato a la presidencia de la Xunta, que para Pedro Puy está «axeitado a unha realidade cambiante». Y todo ello porque, insistió, la economía crece a un ritmo del 3 % anual, lo que va a permitir un cambio de rumbo económico, de ahí que Puy destacase como «anuncio importante» que Núñez Feijoo subrayase que en los próximos cuatro años la capacidad de gasto aumentaría en 250 millones de euros.

Sin disimular su satisfacción por un debate que el PP tenía ganado, el portavoz popular resumió las prioridades anunciadas por Feijoo en su discurso; es decir, el empleo, el impulso de sectores estratégicos como el colectivo de autónomos o la realidad del mundo rural y el plan estratégico que marcará las líneas de la gestión popular, sin olvidar el ámbito social -educación y sanidad- o las infraestructuras.

Y, sobre todo, Puy recordó la invitación a un «permanente diálogo no Parlamento». A su entender, «unha política para que Galicia avance, para vivir nun país mellor».