La Fiscalía investiga a los que se pelearon, a los inductores y a los que grabaron

Los dos menores que aparecen peleándose en el vídeo grabado en Lugo y que fue difundido en las redes sociales ya han sido identificados. Pero no son los únicos que serán investigados. El fiscal superior de Galicia, Fernando Suanzes, explicó ayer que la Fiscalía de menores de Lugo está llevando a cabo una investigación penal para comprobar qué tipo de delitos pudieron haberse cometido durante la pelea de Lugo. Suanzes añadió que en especial, la Fiscalía está tratando de averiguar quiénes son los autores. Y citó a los que se han peleado, que ya están identificados, a los que han intervenido en la inducción de la pelea y los que han grabado las imágenes en el vídeo difundido después en las redes sociales.

La Fiscalía no tiene constancia de incidentes anteriores de este tipo en Galicia. «Es la primera vez que detectamos este tipo de peleas juveniles», afirmó Suanzes, y «de momento hay que encuadrar el caso de Lugo como un incidente puntual». De todas formas, no descartó la posibilidad de que este tipo de incidentes «hayan ocurrido antes y no se conociesen hasta ahora». Pero fue contundente sobre las acciones a tomar: «Una vez detectado, es necesario poner en marcha las medidas para evitar que se repita, con medidas que no solo corresponden al ámbito policial, judicial o fiscal». Y lanzó un reproche: «Es verdad que los juzgados de menores disponen de equipos técnicos que buscarán las mejores acciones a tomar, pero esto requiere de unas medidas preventivas educativas, en los colegios y en las familias».

Quiso separar el fiscal la pelea de Lugo de otras «trifulcas e incidentes puntuales» derivados del botellón o que se producen en zonas de ocio: «No lo igualaría yo a lo que se ha visto en los vídeos de Lugo, donde hay un conjunto de menores que están allí incentivando y tratando de que se realice la pelea».

Más de dos mil delitos

A la Fiscalía no le constan peleas juveniles del estilo de la de Lugo. Pero sí conoce bien los problemas penales protagonizados por menores en Galicia. El año pasado se tramitaron 3.400 causas penales (unas diez al día) por 2.263 delitos cometidos por menores. La mayoría de esos ilícitos están incluidos en el apartado de delitos patrimoniales (robos con fuerza, con violencia y los hurtos), pero sí se analiza el delito concreto se disparan los de lesiones, seguidos de los robos, la violencia doméstica y la conducción de vehículos sin carné. En el 2015 fueron enjuiciados 678 menores: el 77 % de entre 16 y 17 años, y el 22 % de 14 y 15.

Los datos sobre menores forman parte de la memoria de la Fiscalía gallega del 2015, cuando se conocieron 183.186 delitos y los fiscales hicieron 12.696 escritos de calificación.

Otros apartados de la memoria de la fiscalía de Galicia

Sin autor conocido. Cierre anticipado en un 30 % de casos

Un tercio de los casos no llegaron a juicio porque se cerraron anticipadamente al no tener autor conocido. Desde este año esos casos, en su mayoría robos y hurtos, se quedarán en las comisarías y cuarteles. No llegarán a los juzgados hasta que haya alguna novedad en la investigación.

Seguridad vial. 7.000 delitos, la mayoría por alcohol

Los delitos contra la seguridad vial siguen destacando en Galicia. Se incoaron 7.001 delitos y el 61 % son por conducción bajo la influencia del alcohol o las drogas. Los fiscales calificaron 5.379 de esos delitos, lo que representa un 41 % del total de los ilícitos que vieron en Galicia.

Corrupción política. La malversación, en primer puesto

El año pasado se abrieron expedientes penales por 195 delitos relacionados con la corrupción política, social y económica. Los delitos que generaron más acusaciones fiscales fueron la malversación (un 36 %), el blanqueo de capitales y la prevaricación administrativa.

Violencia machista. 5.210 denuncias y 8 mujeres muertas

Ocho mujeres fueron asesinadas por sus parejas el año pasado. Es la cifra más alta del siglo y se produce en un año en el que se registraron 5.200 denuncias por violencia machista. Los fiscales hicieron 1.637 acusaciones, la mayoría por malos tratos ocasionales, seguidos por amenazas.

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