El alcalde de A Mezquita se niega a designar mesas electorales si se repiten las generales el 25D

Carlos Punzón
c. punzón VIGO / LA VOZ

GALICIA

Miguel Villar

Cree que la fecha puede suponer un problema a los ciudadanos al impedirles reunirse con normalidad con sus familias durante las Navidades

03 sep 2016 . Actualizado a las 17:25 h.

Si el Congreso de los diputados no es capaz de resolver la investidura y aboca a una nueva convocatoria de elecciones para el 25 de diciembre, el Concello de A Mezquita, que cuenta con un censo de 1.109 habitantes, está dispuesto a llegar hasta las últimas consecuencias para objetar contra la celebración de los comicios en Navidades. Rafael Pérez, regidor de A Mezquita perteneciente al BNG, anuncia que el gobierno local que preside se negará a designar a los miembros de las mesas electorales si la repetición de las elecciones se lleva a una fecha tan significada.

«Imos buscar a maneira legal para que non recaia na corporación ter que decidir que veciños se quedan sen pasar o Nadal ca súa familia», advierte Pérez Vázquez. «Non sei que pensará a oposición pero os concelleiros do BNG estamos todos de acordo en que sexa a Xunta Electoral Central a que solucione o tema e veña aquí a dicirlle a quen lle toque que se queda sen a comida de Nadal», recalca.

Rafael Pérez considera que la negativa a realizar el pleno de designación de integrantes de las mesas electorales constituye un aviso a la clase política para que escuche a la sociedad y el enfado que entiende existe por poder llegar a generar un problema como señala sería el de impedir que las familias puedan reunirse con normalidad durante las Navidades.

«¿É que non puideron convocar o pleno de investidura uns días antes o en calquera outro momento para que non tiveramos o risco de ter que chegar a votar o día de Nadal?», se pregunta en voz alta el regidor nacionalista.

«Riense de todos, pero non serei eu quen lle diga a xente que ten que pasar todo o día de Nadal nun colexio electoral», advierte, añadiendo que la misma medida debería ser avanzada por las demás corporaciones locales para presionar a las Cortes a modificar el calendario que se pondría en marcha si fracasa, como ha hecho, el nuevo intento de investidura.