Medio Rural califica la concentración de incendios de «actividade anormal»

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Ana Gerpe

Decenas de personas tuvieron que abandonar sus casas por la proximidad de las llamas

11 ago 2016 . Actualizado a las 10:47 h.

La sucesión de incendios que asola Galicia desde el lunes es, para la conselleira do Medio Rural, Ángeles Vázquez, una «actividade anormal». Con el fin de darle respuesta, Vázquez asegura que «se está reforzando» la presión policial para tratar de frenar la actuación de los incendiarios -de hecho, la Guardia Civil identificó ayer a un vecino de O Porriño como supuesto autor de un incendio ocurrido el día 26-. En cuanto a la lucha contra el fuego, la conselleira asegura que la orden que ha dado es que «o que hai que protexer son as vidas e as casas», y que «o que menos interesa son as hectáreas». A primera hora de esta mañana, cinco incendios mantienen la situación 2. Son los de Porto do Son, Cee, Avión, Soutomaio y Santiago.

Cuando el día de ayer, en el que la conselleira hizo esas declaraciones, amaneció, muchos vecinos de Caldas, Cotobade, Mondariz y Soutomaior seguían vigilando las llamas que cercaban sus viviendas. El fuego continuó en Soutomaior, donde la Consellería do Medio Rural mantuvo el nivel de alerta de nivel 2 debido a la proximidad de las llamas con los núcleos habitados. El núcleo de San Martiño de Ventosela fue el más afectado. Junto a la iglesia parroquial, fueron los propios vecinos los primeros en enfrentarse a un fuego repentino con mangueras, hasta que llegaron efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME), que montó una base junto a Aldeas Infantiles, cuyos 45 habitantes siguen desalojados. Por la tarde se activó la alarma de nivel 2 en el lugar Xunqueiriñas, en Arcade, también en el municipio de Soutomaior. A medianoche, el fuego seguía descontrolado y los vecinos seguían con gran inquietud su evolución. Muchos, pertrechados con cubos, ayudaban en las tareas de extinción. En Crecente se declaró otro incendio por la tarde, a la altura de la parroquia de Albeos, que mantuvo cortada la carretera que une Arbo con Ribadavia. El Ejército y medios aéreos acudieron a combatir las llamas.

Durante la noche se había estabilizado el fuego de Cee, en el que resultaron arrasadas cien hectáreas de terreno, y a lo largo de la mañana se daban por controlados los incendios de Mondariz (200 hectáreas), Caldas (300) y Cotobade (365), pero surgían nuevos focos en Pontevedra -en Lérez y Ponte Sampaio- y Caldas -cercano a la fábrica de Clesa-. Al igual que en los últimos días, la actividad incendiaria se intensificaba desde primera hora de la tarde.

Un incendio en la parroquia santiaguesa de Fecha continuaba activo a última hora de la tarde de ayer. Tres aldeas de la zona tuvieron que ser desalojadas ante la cercanía de las llamas, que calcinaron más de una veintena de hectáreas. El fuego se declaró a las 12.25 horas y el fuerte viento que sopló durante todo el día complicó significativamente las labores de los numerosos medios de emergencias desplazados. La Consellería de Medio Rural declaraba por la tarde el nivel dos de alerta, y los vecinos se mostraron muy nerviosos ante el temor a perder sus viviendas.

Hasta cuatro incendios, uno de ellos con tres focos diferentes en un radio de 500 metros, comenzaron casi al mismo tiempo en el municipio de Avión, un dato que apunta a la intencionalidad de los fuegos en una jornada de nuevo de intenso calor y en la que sopló el viento, un elemento que hasta en los últimos días se había mantenido en calma haciendo menos propicia la propagación de los fuegos. A media tarde, la Xunta declaraba la situación de nivel dos por proximidad al núcleo de población de Nieva como medida de prevención.

La comarca de Fisterra sigue también en vilo por el fuego. Después del devastador incendio de A Ameixenda (Cee), ayer por la tarde se registró otro fuego en la aldea de Sembra, en el mismo municipio, que obligó a desalojar a las personas mayores de sus viviendas, alguna en ambulancia debido a sus problemas respiratorios, y tiene en preventivo al lugar próximo de Cabaleriza, por si fuese necesario sacar a la gente de sus casas. Los jóvenes colaboran en la extinción con tractores, cisternas y todo lo que tienen a su alcance. También en Fisterra, donde por la tarde rebrotó el incendio del cabo de la Nave, se produjo otro nuevo en la parroquia de Sardiñeiro, también con el desalojo de dos bloques de viviendas pegados a la variante de la autovía Costa da Morte.

A última hora del miércoles se había conseguido extinguir el incendio que el martes se había declarado en Cee, pero continuaba activo y en situación 2 otro surgido en este mismo municipio. También en situación dos seguían los de Santiago, Porto do Son, Arcade, Avión y Soutomaior. Y permanecían activos otros en Cerceda y Ponte Sampaio. Mientras, el de Rois, que se había iniciado a última hora de la mañana, estaba controlado.

El último de los fuegos declarados se produjo poco más tarde de las 22.30 horas, también en el municipio de Porto do Son, en las parroquias de Caamaño y Xuño.

Las llamas, descontroladas, obligaron a evacuar numerosas viviendas de la zona y a trasladar por seguridad a los vecinos, que se mostraban reticentes a abandonar sus casas.  Los niños permanecían en el polideportivo de Xuño, la carretera AC-550 fue cortada al tráfico. Uno de los vehículos de la Guardia Civil quedó completamente calcinado.

Con información de Carlos Cortés, Alejandro Martínez, Brais Capelán, Maite Rodríguez, Juan Ventura Lado y Javier Romero.