Los pequeños grandes héroes de Ribadeo

m. s. ribadeo / LA VOZ

GALICIA

FOTO MIGUEL

Los niños que rescataron a un hombre del fango volvieron al agua tras su «aventura»

26 jul 2016 . Actualizado a las 14:04 h.

Los varamientos de embarcaciones en la ría de Ribadeo se repiten un día sí y otro también por falta de calado. Esta misma semana tocó fondo un carguero con pasta de papel de Ence, en Navia, y la tripulación tuvo que aguardar a que subiera la marea para continuar el rumbo. Este pasado domingo no fue un carguero el que varó en la ría con la bajamar, sino un pequeño bote con un jubilado y algunos familiares suyos que habían decidido aprovechar la mañana y el mar en calma para navegar por la ría. El bote tocó fondo, o mejor dicho, fango, y ahí se quedó clavado. Los demás ocupantes salieron como pudieron entre el lodo hasta alcanzar la orilla, pero Luis, el dueño del bote, intentó empujarlo en vano y fue cuando él mismo acabó hundiéndose cada vez más en el fango sin poder moverse. 

Coincidió que paseaba por la zona  una pandilla de adolescentes, chicos y chicas integrantes del Club de Remo de Ribadeo, que ese día celebraban con una barbacoa el final de la temporada con sus padres y familiares. Ni cortos ni perezosos, Juan, Nerea, Antonio, Cristina, Iñaki, Lucía, Iker, Martín, Álex, Javi y dos chicas de nombre María, al ver al hombre atrapado en el lodo sin poder salir fueron en su ayuda. Lo intentaron en un primer momento, pero era tarea difícil, quedaban también enterrados en el fango de la ría. «Chegaron cheos de barro, de lodo, ata as orellas ata onde nós, pais e nais, estabamos preparando a barbacoa; ao velos a sorpresa foi tremenda, preguntámoslles de ónde viñan, que fixeran, pero que nos estaban contando», explicaba ayer una de las madres.

«Despois xa nos contaron todo o que pasara; que chamaran ao pai dun dos rapaces que é mariñeiro, Popi, que foi con eles cun cabo, para tratar de rescatar ao home e, efectivamente, así conseguiron sacalo, porque os nenos intentárono antes eles sos pero non foron capaces; e ben, comemos e ao final ata se deron un baño todos xuntos na zona do club de remo; foi unha aventura pero terminou ben para todos e cun baño final, que boa falla lles facía».

Efectivamente, los chicos avisaron al padre de uno de ellos, marinero, le explicaron la situación y este rápidamente fue con un cabo y así, entre todos, agarrados a la cuerda, lograron sacar a Luis del fango y todo quedó en un susto, uno más de los que acostumbra a dar la bajamar en la ría ribadense. Y Nerea, Juan, Antonio -que se cortó en un dedo-, Cristina, Iñaki, Lucía, Iker, Martín, Álex, Javi y las dos chicas llamadas María quedaron como héroes y heroínas, eso sí, llenos de barro hasta las orejas.