La alerta amarilla por la ola de calor se extenderá mañana a toda Galicia

Laura García del Valle
Laura G. del Valle REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

ANGEL MANSO

Desde junio, más de 20 personas sufrieron golpes de calor en la comunidad

16 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Las predicciones de cara a los próximos días cada vez estiman temperaturas más altas. Si bien este sábado pontevedreses y ourensanos se encuentran ya en alerta amarilla -que se decreta ante fenómenos meteorológicos habituales pero potencialmente peligrosos-, esta advertencia se extenderá el domingo al resto de la comunidad, quedando pocas zonas libres de un riesgo moderado para sectores de la población como los mayores y los niños.

Las altas presiones y la llegada de una masa de aire cálido procedente de África serán las protagonistas indiscutibles de un fin de semana de playa en el que habrá que extremar las precauciones. En las cuatro provincias se alcanzarán el domingo los 30 grados, y en zonas de Pontevedra y Santiago se rebasarán los 35. Por su parte, el mercurio en Ourense llegará a los 38 grados en las horas centrales del día. El lunes, el calor remitirá solo en la provincia de A Coruña, donde como mucho se alcanzarán los 27 grados. En cambio, en el resto de ciudades gallegas los termómetros puntuarán aún más alto que el domingo. Vigo llegará a los 32 grados, Ferrol a los 33, Lugo a los 34, Pontevedra y Santiago a los 35 y Ourense rozará los 40.

Al alto porcentaje de gallegos que se preparan, bañador y toalla mediante, para disfrutar de las jornadas soleadas de estos días, el subdirector de Información de Saúde e Epidemioloxía, Xurxo Hervada, les recuerda que es importante no prescindir de la sombrilla. Y es que, como alertan desde Meteogalicia, entre las tres de la tarde y las nueve de la noche del sábado y del domingo, lo mejor es no estar expuestos al sol. Menos si uno sufre de enfermedades crónicas, cardíacas o respiratorias, ya que los síntomas pueden verse agravados en estas circunstancias.

«Con temperaturas por encima de los 25 grados el cuerpo empieza a percibir el exceso de calor, sobre todo cuando hay un exceso de humedad», afirma el doctor. En zonas donde las temperaturas sean altas pero no extremas deben prestar especial atención las personas mayores. «Mucha gente de edad avanzada -explica Hervada- no tiene sensación de sed, por lo que es más fácil que se deshidraten; es importante que beban agua o zumos con frecuencia».

Aunque hay grupos de especial riesgo, toda la población es susceptible de padecer una insolación. De hecho, desde junio todavía no se han registrado temperaturas tan altas como las que se están viviendo estos días y, según fuentes del Sergas, ya ha habido más de 20 casos en Galicia por golpes de calor. Las principales causas de este aumento de la temperatura corporal -normalmente por encima de los 39 grados- suelen ser sudoración excesiva, mareos, sed intensa, calambres musculares y agotamiento. Para aquellas personas que tengan dudas o sientan un malestar derivado del calor, Cruz Roja dispone de un servicio de atención telefónica a través del cual un experto facilita consejos y orientaciones para prevenir los efectos adversos como consecuencia de las altas temperaturas.

La Administración autonómica, por su parte, no ha activado ningún protocolo específico porque no se prevé «a superación dos límites establecidos no Plan da Xunta para considerar unha situación de alerta por vaga de calor». No obstante, desde Sanidade aseguran que Galicia se encuentra al límite.

El tiempo volverá a la normalidad a partir del próximo miércoles

Hasta la jornada del lunes, Galicia se encontrará en una situación atmosférica caracterizada por las altas presiones. El martes, el anticiclón todavía se dejará notar, con lo que los cielos estarán despejados o poco nublados. Sin embargo, los termómetros dejarán de marcar valores tan altos. En Ourense, las máximas alcanzarán como mucho los 32 grados y en Pontevedra no se llegará a los 30. En el tercio norte, las temperaturas todavía serán altas -entre 27 y 29 las máximas de Ferrol, Lugo y A Coruña-, aunque solo se alcanzarán los 30 grados en Santiago. A partir del miércoles comienza a perderse la influencia anticiclónica, así que aparecerán más nubes que, de hecho, dejarán lluvias el jueves y el viernes en A Coruña. Con el paso de los días, las temperaturas recuperarán valores más propios de la comunidad.